Irun se deshace de sus últimos vestigios franquistas
Quedan en torno a medio centenar de placas del régimen en fachadas de la ciudad
JON GUEZALA - Miércoles, 12 de Diciembre de 2018 - Actualizado a las 06:03h
Placa del Instituto de la Vivienda en la calle Serapio Múgica
IRUN- A pesar de que ya han pasado más de cuatro décadas desde el final de la dictadura franquista, todavía siguen quedando restos de la simbología del régimen en forma de placas u otros elementos urbanos en diversos lugares del Estado. Aunque el Ayuntamiento de Irun lleva mucho tiempo trabajando para eliminar toda referencia al franquismo del urbanismo de la ciudad, a través de iniciativas como la modificación de los nombres de varias calles en 2014 y la retirada de dichos símbolos en espacios públicos, la ciudad arrastraba hasta hace poco una tarea pendiente: la supresión de en torno a medio centenar de placas situadas en edificios privados.
En mayo del presente año, el Pleno consistorial aprobó una moción con la que se acordó buscar las fórmulas apropiadas para garantizar el cumplimiento de la retirada de los símbolos del régimen en fachadas de inmuebles privados. De acuerdo con la Ley de Memoria Histórica, la obligación de retirar dichas placas correspondería a los vecinos. Sin embargo, el Consistorio indicó hace unos meses que se pondría en contacto con todas las comunidades afectadas para que la actuación no supusiera coste alguno para los propietarios. Según fuentes municipales, las 45 comunidades contactadas expresaron su conformidad con la medida.
INICIO DE OBRAS Así, acogiéndose a una subvención de 5.753 euros otorgada por el Gobierno Vasco, la entidad municipal inició ayer los trabajos de retirada de las placas, obras que se prolongarán durante esta semana. Una de las actuaciones destacadas de ayer fue la cobertura de la placa de piedra del extinto Instituto de la Vivienda, que incluía el yugo y las flechas, situada en la fachada trasera del número 33 de la calle Serapio Múgica.
Allí estuvieron presentes los delegados de Urbanismo y de Valores y Derechos Humanos, Miguel Ángel Páez y Mónica Martínez respectivamente. Páez afirmó que esta es una de las acciones con las que se pretende cerrar “una etapa tan desagradable y dolorosa de nuestra historia”. Por su parte, Martínez recordó que desde su área se está trabajando en la memoria histórica a través de un proyecto de investigación sobre la represión militar en Irun durante la Guerra Civil y la posguerra. Se trata de un trabajo que hasta el momento ha permitido recuperar cerca de un millar de documentos y alrededor de 300 fotografías que sirven de testimonios de la época.
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