«Si queremos que la ciudad mantenga su pulso, tenemos que echar una mano en casa»
El Ayuntamiento pondrá en circulación 15.000 bonos de compra para impulsar el consumo en el pequeño comercio y la hostelería local
El Ayuntamiento de Irun ha puesto en marcha una nueva iniciativa para fomentar el consumo en el pequeño comercio y la hostelería de la ciudad. La nueva acción se enmarca en el plan de choque Irun Aurrera para paliar las consecuencias económicas y sociales derivadas de la pandemia de la Covid-19.
El alcalde, José Antono Santanto, acompañado por comerciantes y hosteleros de la ciudad y por representantes de asociaciones de ambos gremios, dio a conocer ayer esta nueva iniciativa en la primera rueda de prensa presencial ofrecida en el ayuntamiento desde que se decretara el estado de alarma.
«Dentro del plan Irun Aurrera dimos un paso fundamental hace unas semanas con las ayudas directas, de las que ya hemos abonado más de mil», señaló el alcalde. «Ahora, con esta nueva iniciativa, impulsamos el consumo en el comercio y la hostelería local. Tenemos una partida de 150.000 euros, que se materializará en bonos y que se activará para una primera fase (parte de junio, julio y agosto). Después, en otoño, habrá una segunda fase».
Esta primera partida de 150.000 euros tratará de mover «otros 300.000 euros de consumo privado», añadió el alcalde. «El objetivo es que hagamos nuestras compras en Irun. Si queremos que la ciudad mantenga su pulso, tenemos que echar una mano en casa».
Según la información facilitada ayer, a finales de junio se pondrán en circulación 15.000 bonos de 10 euros cada uno, canjeables hasta el 31 de agosto. Estos bonos no tendrán formato físico. No habrá vales para entregar en la tienda. Simplemente, el cliente facilitará su número de DNI y un programa informático se encargará de contabilizarlos.
Diez bonos por persona
Los bonos estarán disponibles para todas las personas empadronadas en Irun que tengan 16 años o más, a partir de la publicación de la convocatoria, prevista para los próximos días. Cada irunés podrá usar 10 bonos (dos de ellos como máximo por establecimiento).
En el caso del comercio, para cada bono utilizado, la compra mínima deberá ser de 30 euros (20 aportados por el cliente y 10 por el Ayuntamiento). En el caso de la hostelería, la compra mínima por bono será de 20 euros, de los que el cliente aportará 10. No se podrán utilizar bonos de más de una persona para pagar una misma compra y las compras sólo de productos alcohólicos quedan fuera de la inciativa.
Una vez publicada la convocatoria, se abrirá un plazo de 10 días para que los establecimientos interesados se puedan adherir a través de la web municipal. El Ayuntamiento, en colaboración con Bidashop y Mugan, facilitará la información necesaria para gestionar la aplicación informática y cada inscrito contará con un distintivo de adhesión. El alcalde aseguró ayer que se está trabajando para que los establecimientos puedan recibir semanalmente el dinero de los bonos.
Los hosteleros y comerciantes valoraron de forma muy positiva la iniciativa presentada ayer. «Este Ayuntamiento ha trabajado sobre la oferta y la demanda, con ayudas directas a fondo perdido y con la promoción del consumo», señaló Kino Martínez, secretario general de la Asociación de Empresarios de Hostelería de Gipuzkoa. «Ha hecho un esfuerzo económico muy importante, que supera el de Donostia, por lo que valoramos la sensibilidad que ha demostrado con los sectores más castigados por la crisis».
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