IRUN
«Las procesiones de Irun no tenían nada que envidiar a las de Hondarribia»
El libro de Santiago Reyes repasa 400 años de historia de la Semana Santa en la ciudad. Los beneficios obtenidos por la venta de la publicación se destinarán a la restauración de patrimonio relacionado con la Semana Santa de la parroquia del Juncal
18.04.14 - 00:03 -
1979. Imagen de una de las últimas procesiones celebradas en Irun
A principios del siglo XX. Uno de los pasos, portado por los fieles y contemplado por el público, recorre las calles del municipio, en una postal fechada en el año 1914.
Junto al Juncal. Santiago Reyes muestra un ejemplar del libro. :: DE LA HERA
1979. Los cofrades, con otro de los pasos, ascienden por la calle San Marcial.
«No sabía que hasta hace solo 34 años había habido procesiones en Irun. Al enterarme, por curiosidad, empecé a buscar información...» Y esa búsqueda ha desembocado en la publicación de 'La Cofradía de la Vera Cruz y las procesiones de Semana Santa en Irun'. Su autor, Santiago Reyes, estudiante de Derecho y concejal del PP en Irun, comenzó con aquellas indagaciones hace ya dos años y medio. Esta semana se puso a la venta la publicación que recoge los 400 años de historia de las procesiones en el municipio.
La decisión de dar a conocer toda la documentación que halló al respecto estuvo motivada por que «teníamos información para cubrir, sin lagunas, 400 años de historia. Pensé que era algo que tenía que ponerse en común de forma cohesionada». Santiago Reyes explica que «al final, también es la historia de la sociedad de Irun, porque la cofradía estaba formada por laicos». El prólogo de la publicación ha sido escrito por Fermín Labarga, experto en estudios sobre cofradías, profesor de Historia de la Iglesia de la Universidad de Navarra y director de Cofradías de la Diócesis de La Rioja.
La Cofradía de la Vera Cruz es el hilo conductor del libro, «desde su fundación en 1579 y hasta su desaparición en 1980». Además de la documentación histórica, para narrar la historia de esta cofradía Santiago Reyes ha entrevistado a «unas 30 personas» vinculadas a la misma. «Eran los protagonistas, y cada uno vivía su participación en las procesiones de forma distinta». Pero lo que tienen en común es que «todos han tenido palabras de buen recuerdo y nostalgia hacia aquello. Dicen que las procesiones de Irun eran muy vistosas y no tenían nada que envidiar a las de Hondarribia», explica Santiago Reyes.
El joven autor destaca las que se celebraban a finales del XIX en el municipio, que atraían a «numerosos aristócratas de Francia y Navarra, que acudían a nuestra localidad a contemplar las procesiones del Viernes Santo». Posteriormente, en el incendio de 1936, «ardieron algunos de los pasos»; pero no obstante «durante las décadas de los 40 y 50 se formó un grupo de artistas locales que impulsaron la renovación y restauración total de los pasos. Encontramos nombres como el pintor Gaspar Montes, la polifacética Dolores Salís o el arquitecto Ramón Iribarren, que colaboraron con la Cofradía de la Vera Cruz».
Anécdotas
Su desaparición, según señala el autor del libro, «fue por varias razones», pero principalmente se debió «al contexto histórico de los años 80, que no valoraban tanto las cuestiones de tradiciones. Quizá en aquel momento se percibieron como algo vinculado al pasado. Eso, unido a una serie de cambios que se vivieron en la Iglesia, hizo que las autoridades religiosas optasen por su supresión».
Sin embargo, Santiago Reyes recalca que «yo creo que esa mentalidad de los años 80 está superada. Hoy en día, raro es el municipio que tiene procesiones de Semana Santa y no las promociona. Por hablar de lo más cercano, ahí tenemos el ejemplo de Hondarribia, donde son un atractivo turístico».
400 años de historia de las procesiones dan para muchas anécdotas, que también se recogen en esta publicación. Santiago Reyes recuerda una «que me llamó mucho la atención, y que ocurrió a finales del XIX. Los apóstoles, que desfilaban en la procesión representados por ciudadanos, llevaban cada uno su atributo. En el caso de uno de ellos era un libro, y como querían que portase uno que fuera hermoso, le dejaron un volumen de tapas muy elegantes pero en cuya portada ponía 'El mundo físico'. En la prensa de la época se refleja ese 'chascarrillo'. Es una muestra de que, aunque la Semana Santa sea algo serio, también se tomaban las cosas con buen humor y filosofía». Y es que, según señala el autor, «tendemos a pensar en el humor como algo solo de nuestros tiempos, pero no es así». El libro recoge otra muestra de ello: «en el siglo XVI, en una de las procesiones, parece ser que un cura quemó con un cirio al público. Aquello acabó en un pleito, y me resultó muy gracioso el lenguaje que utilizaban para describir la situación: 'iba pringando con cera a las muchachas...'».
Fines benéficos
'La Cofradía de la Vera Cruz y las procesiones de Semana Santa en Irun', que «está teniendo muy buena acogida», puede adquirirse en el kiosco de la plaza San Juan y en la sacristía de la parroquia del Juncal, al precio de 20 euros. Todos los beneficios obtenidos a través de las ventas se destinarán a la restauración de patrimonio relacionado con la Semana Santa de la Parroquia de Santa María del Juncal.
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