Las obras del paseo entre Oinaurre y Alai Txoko arrancan mañana
Aunque está previsto que haya que ocupar el arcén y quizá parte de la calzada, no se interrumpirá en tráfico
- M.A.I.
- IRUN
El departamento de Vía Pública y Obras tiene previsto que mañana arranquen los trabajos de ejecución de la primera fase del paseo peatonal paralelo a la avenida Elizatxo que permitirá una conexión peatonal real entre el parque Alai-Txoko y la calle Muinoa, y que con una posterior segunda fase, hasta la calle Alei, alcanzará el tramo construido con la urbanización de Oinaurre, culminando así el enlace para peatones entre el centro y este nuevo desarrollo urbanístico de la ciudad.
Los dos tramos que se corresponden con las dos fases de este proyecto son los únicos que no disponen de acera en condiciones y, por tanto, los que impiden colmatar la conexión completa desde el casco urbano y hasta el barrio de Ventas.
Desde el área de Obras anunciaron ayer que «para la ejecución de las obras se ocupará el arcén y parte de la calzada actual, estrechando los carriles de circulación existentes», pero se aseguraba al mismo tiempo que «se mantendrá el tráfico en ambos sentidos en todo momento». Con motivo de la obra se ocuparán también espacios en la zona de huertas existente junto arcén actual, en el tramo entre las calles Belitz y Muinoa.
En la primera fase se realizarán también algunos trabajos en zonas que correspondientes a la segunda fase (entre calles Muinoa y Alei), que deben ejecutarse en su totalidad al inicio de las obras. Es el caso del soterramiento de la línea eléctrica de media tensión, por ejemplo. El plazo de ejecución de esta Fase 1 es de tres meses y se ejecutará con un presupuesto de 370.235 euros, para el cual el Ayuntamiento contará con una subvención del Gobierno Vasco. La empresa adjudicataria de la obra es Sasoi Eraikuntzak.
Más de diez metros de ancho
Este nuevo tramo del paseo se ha proyectado con la idea de dar continuidad a la sección del paseo que llega a la calle Alei desde el ámbito de Oinaurre para poder mantener el mismo perfil, con una acera de cinco metros de ancho acompañada por dos franjas verdes, la primera de 3 metros, situada entre bordillos, contigua a la calzada y una segunda, al lado contrario, con una anchura de 2,65 metros. Prácticamente la totalidad de los terrenos necesarios para la ejecución del proyecto son de titularidad de la Comunidad Autónoma del País Vasco.
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