Xabier Iridoy, portavoz jeltzale. / PNV de Irun
El portavoz jeltzale, Xabier Iridoy, ha recordado hoy el porvenir de la cesión del edificio de Emigración al Ayuntamiento de Irun, así como los siguientes pasos posibles a dar. “Han pasado más de 10 años desde que el alcalde Santano anunció por primera vez un posible acuerdo con el Estado para la cesión del edificio de Emigración y más de medio año desde que el delegado del Gobierno, Jesús Loza, confirmó dicho acuerdo. Ocasión que el alcalde Santano aprovechó, para declarar que el proyecto de rehabilitación estaba elaborado. Años de espera, de continuos anuncios en medios de comunicación del alcalde Santano, que después no se efectuaban como tal. Y por fin, el año pasado, después de tanto vender públicamente, parecía que la cesión se iba a efectuar, aunque no había ni convenio, ni firma oficial que asegurara y garantizara al Ayuntamiento de Irun ese cese definitivo. Aún así, aún sin que el edificio fuera del Ayuntamiento de Irun, el gobierno socialista planteó incorporar al presupuesto de 2018 la cantidad de 500.000 euros para una primera actuación inminente: acondicionar la fachada y la cubierta”, ha mencionado Iridoy.
«Sin embargo, la realidad de todo este proceso ha sido bien diferente. En octubre del año pasado el delegado de Hacienda, Miguel Ángel Páez, aseguró que el edificio de Emigración estaba a punto de pasar a manos municipales, e insistió en la necesidad urgente de intervenir y destinar 500.000 euros a la rehabilitación del mismo, aun no siendo esta de propiedad municipal aún», ha insistido.
Una vez analizada la situación y la urgencia, el pleno concluyó que al no ser este aún de propiedad municipal el Ayuntamiento de Irun no podría realizar obra alguna, por lo que mientras no se transfiriera la titularidad, por responsabilidad, en lugar de tener un dinero retenido y sin uso, era prioritario dedicar esa cuantía a otras necesidades más urgentes de la ciudad. Ante tal decisión del pleno, máximo órgano de representación política de la ciudadanía, la respuesta del gobierno socialista, encabezado por el alcalde Santano, fue que era cuestión de semanas que el edificio de emigración perteneciera al Ayuntamiento de Irun, y que las obras eran imprescindibles. Es más, a raíz de ello, el alcalde Santano anunció que no descartaba llevar la aprobación de los 500.000 euros a un pleno extraordinario antes de que finalizara el año 2018″, ha señalado Iridoy.
Cabe recordar que ha sido este pasado viernes cuando Irun ha podido afirmar que cuenta con la titularidad del edificio de Emigración. «Aún así, aunque una vez más el alcalde haya querido vender, de manera sucesiva, la piel del oso antes de cazarlo, y no se hayan cumplido los plazos prometidos, lo que denota y evidencia su ineficacia en la gestión, nos alegramos de que se haya producido la cesión».
Por ello, el portavoz jeltzale ha recalcado que “ahora más que nunca, teniendo en cuenta además la moción que se aprobó el pasado viernes, 26 de abril, en sesión plenaria por mayoría, Irun necesita una modificación del presupuesto 2018 prorrogado, para habilitar los 4,5 millones y dar así comienzo a nuevos proyectos, como puede ser la rehabilitación del edificio de emigración, así como otras tantas actuaciones».
Para finalizar, Iridoy ha querido incidir en esa supuesta urgencia que recalcó el alcalde hace ya medio año. “En octubre decían que era necesario y urgente poner en marcha los trabajos en el edificio de emigración. Si tan urgente era, ahora es el momento, el edificio ya es nuestro, ahora sí, somos propietarios y el Ayuntamiento de Irun puede efectuar todas las obras que crea pertinentes, por lo que tal y como prometió el alcalde, debería convocar un pleno extraordinario y posibilitar al menos la aprobación de los 500.000 euros necesarios”.