El PNV reduce sus exigencias para pactar el presupuesto y «que Irun salga lo antes posible de esta situación de bloqueo»
Los jeltzales han remitido al Gobierno municipal un documento con enmiendas al borrador por 0,8 millones y con 3 compromisos políticos
Poco o nada confía EAJ-PNV en las negociaciones que el Gobierno municipal mantiene abiertas con la oposición. Los jeltzales han ofrecido a los socialistas una lista reducida de sus 47 enmiendas iniciales con el objetivo de facilitar un acuerdo para «que se apruebe el presupuesto de 2020 e Irun pueda salir de esta situación de bloqueo», enunció el portavoz, Xabier Iridoy.
Recordó que el consistorio ha navegado en 2019 con un presupuesto prorrogado y que ha arrancado el nuevo ejercicio sin tener aún las cuentas para 2020. «No es baladí», abundó el concejal de la formación Jose Corchón. «En otros municipios ya están con el presupuesto de 2020 y no vienen de unos prorrogados que no dejan incorporar nuevas actuaciones». Aseguró que cuanto antes se disponga del nuevo presupuesto «mejor, porque hace falta el año completo para gestionarlo. Si no, las cosas se atrasan y este Gobierno acumula una bola cada vez mayor de inejecuciones».
800.000 euros para el acuerdo
La propuesta para facilitar la aprobación ha sido reducir sus exigencias a un tercio de su valor económico. Si las 47 iniciales requerían una inversión de 2,4 millones, la batería que han remitido a los socialistas suma 0,8 millones y se limita «a acciones que consideramos importantes para la ciudad: crear un servicio de acompañamiento a mayores en situación de aislamiento, acondicionar explanadas en desuso para aparcamiento (frente al instituto Plaiaundi, Miguel de Ambulodi, avenida Iparralde), adecentar el camino peatonal a Txingudi desde Jaizubia, implantar el programa Haurrak parkean para la normalización del euskera, un rocódromo al aire libre, mejorar ayudas a Olentzero y Euskal Jira», enumeró entre otras Corchón.
La financiación de las 47 iniciales se sustentaba en tres enmiendas de detracción de las que ahora sólo mantienen una: retrasar un año la construcción del edificio de oficinas municipales de la plaza de San Juan. Por sí sola, esa partida ya ahorraría 1,8 millones, pero el PNV no aceptaría una transacción para reducirla porque considera que «antes de acometer la construcción de un edificio tan importante y en un lugar tan estratégico, habría que hacer un análisis que incluyera un potente proceso de participación ciudadana y un concurso de ideas. No basta con que una empresa haga su planteamiento y el Gobierno lo acepte», afirmó Iridoy.
En su propuesta para sellar un acuerdo presupuestario, los jeltzales incluyen también tres «compromisos políticos con proyectos que para nosotros son clave», añadió Iridoy. Uno es el traslado de las pistas de Plaiaundi a Txenperena, que sabemos que está en marcha pero queremos un compromiso. Otro es impulsar el tercer polideportivo de la ciudad en San Miguel-Anaka. El tercero, impulsar el bidegorri que una las tres ciudades de la comarca por Plaiaundi».
No hay comentarios:
Publicar un comentario