Noticia publicada en Diario Vasco, el domingo día 6 de Febrero de 2022.
Txenperenea, la opción segura, aunque lenta, para sacar las pistas de Plaiaundi
El Gobierno Vasco detallará dentro de una semana sus proyectos para desarrollar otros asuntos pendientes del Plan Director de Txingudi
Imagen actual de las instalaciones deportivas de Plaiaundi./F.DE LA HERA
La consejera vasca de Medio Ambiente, Arantza Tapia, visitará Plaiaundi el próximo día 14 para dar detalle de las diversas inversiones que se prevén este año en Plaiaundi para desarrollar varios puntos pendientes del Plan Director de Txingudi como la ampliación de la laguna de San Lorenzo, el camino peatonal y ciclista desde la muga con Hendaia hasta el encuentro con Hondarribia. La consejería aún tendrá pendientes otras cuestiones para las que espera recibir financiación europea.
Con todo, la deuda de la que más se habla es la de trasladar las pistas deportivas y aquí la primera jugada debe ser del Ayuntamiento, que tiene que definir dónde llevarlas, aunque construir las nuevas instalaciones y demoler las viejas será tarea compartida de consistorio, Diputación y Gobierno vasco. Cuando el 28 de diciembre de 2018 el Pleno apostó por Txenperenea como destino ya se sabía que el proceso no sería rápido. Antes de mover una sola piedra, había que modificar los usos previstos en el Plan General de Ordenación Urbana y eso lleva años. Aunque no sean casos similares, en Vía Irun se iniciaron los trámites de modificación en 2017 y, aun con toda la maquinaria esperando en la línea de salida a que el Adif diera luz verde, el final no será antes de 2023.
En Txenperenea la tarea es menos ardua, pero tiene sus complejidades. La primera, obvia, es que hay que modificar el planeamiento porque estaba planeada otra cosa. En concreto, casas. Así, lo primero fue volver a plantear el futuro nuevo barrio, redibujar calles y casas para hacer sitio al espacio deportivo. Lo hizo el equipo de arquitectos que diseñó el desarrollo original de Txenperenea y le llevó muchos meses. En noviembre de 2020 se formuló la propuesta y en diciembre se presentó ante el Consejo Asesor. Desde entonces «se ha elaborado el documento de Modificación del Plan General y el estudio aeronáutico específico que justifica que, si bien el terreno natural y la ordenación vulneran las servidumbres del aeropuerto de Hondarribia, esta vulneración no afecta a la seguridad del mismo», explicó en el pleno de presupuestos el delegado de Urbanismo, Miguel Ángel Páez, en el contexto de una enmienda del PNV.
El expediente está a la espera del informe de Aviación Civil, que, a su vez, espera a que se pronuncien AENA y AESA
«Se ha solicitado informe favorable vinculante a la Dirección de Aviación Civil», que el pasado noviembre notificó que «el documento se ha trasladado a AENA y a AESA (seguridad aereoportuaria) para que, de acuerdo con sus competencias, se pronuncien sobre la nueva ordenación», siguió Páez. Hasta que ambas se pronuncien, queda interrumpido el plazo de emisión de informe de Aviación Civil. Cuando finalmente llegue su informe, en el supuesto esperable de que sea favorable, «podremos proceder a la aprobación inicial en el pleno municipal y, tras exposición pública de 45 días, a la aprobación provisional, solicitando la declaración ambiental estratégica al Gobierno Vasco, que tendrá dos meses». Aún faltará el informe de la Comisión de Ordenación Territorial del Gobierno Vasco (3 meses de plazo) «para finalmente traer a pleno la aprobación definitiva de la Modificación».
Entendiendo que el Programa de Actuación Urbanizadora (PAU) se podrá encargar en algún momento de este año, se incorporó al presupuesto esa petición jeltzale. No así otras enmiendas del PNV para contratar el Proyecto de Reparcelación y el Proyecto de Ejecución, ya que hay que cerrar etapas previas para poder acometerlos. Cuando se apruebe el de Ejecución se podrá sacar a concurso la obra, adjudicarla y acometerla.
Nada de todo este largo desarrollo es una sorpresa. «Es la lógica de lo que en urbanismo supone una Modificación Puntual de Elementos del Plan General», comentó Páez, que recordó que se habló de ello cuando, con los votos de Sí se Puede Irun, PNV y EH Bildu, el Pleno decidió reubicar en Txenperenea las instalaciones de Plaiaundi. La apuesta fue por la que se consideró «la única ubicación posible», pero en la que no se podía realizar «una intervención directa», señaló Páez, «requiere de todos esos permisos previos antes de poder trabajar en la construcción de las pistas».
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