Noticia publicada en Diario Vasco,el miércoles día 30 de Marzo de 2022.
Hallan un cuerpo en el río Bidasoa que podría corresponder al migrante desaparecido el día 12
La Guardia Civil de Gipuzkoa realizando servicio de vigilancia en el río, ha encontrado un cadáver flotando en el Bidasoa, en las inmediaciones del Puente Internacional de Biriatou de Irun
La búsqueda de Ibrahim Diallo, el migrante senegalés de 24 años desaparecido el pasado 12 de marzo en el río Bidasoa, llegó este miércoles a su fin. A falta de que se realicen las diligencias oportunas para la identificación del cadáver, los datos aportados sobre el cuerpo localizado este miércoles en el agua por la Guardia Civil apuntan a que es el de Ibrahim Diallo. Es el cuerpo de una persona «joven y de raza negra», y se localizó flotando en la superficie del río «en una zona próxima al lugar de la desaparición del migrante». Fue una patrulla fluvial del servicio marítimo de la Guardia Civil el que localizó el cadáver a 400 metros aguas arriba de la zona de Zaisa, cerca de la gasolinera de Puntxas situada en la N-121-A. Las fuentes consultadas por este periódico reconocen que lo más probable es que el cuerpo encontrado sea el del joven senegalés.
El operativo que pusieron en marcha los servicios de emergencia para dar con el desaparecido tras la voz de alarma dada por un vecino de Biriatu que le vio cruzar junto a otras dos personas, se dio por finalizado cuatro días después con la confianza que pasados los días el cuerpo saliera a flote, como así ha sido. No obstante, durante estas últimas dos semanas los agentes de la Guardia Civil han seguido buscando en la zona tanto en tierra como en el agua. Hasta que este miércoles una zodiac que patrullaba el Bidasoa localizó el cadáver «en las inmediaciones del puente Internacional de Biriatou de Irun», confirmaron desde la Delegación de Gobierno e Euskadi.
Vídeo. Las labores de búsqueda cuando se conoció la desaparición del joven. /
Tras el hallazgo del cadáver, los agentes desembarcaron el cuerpo en la zona de Zaisa. El cuerpo, que presentaba «un alto grado de descomposición», fue trasladado a tierra donde la unidad orgánica de la Policía Judicial de la Guardia Civil de la Comandancia de Gipuzkoa junto al forense, procedieron al levantamiento judicial del cuerpo, iniciando las diligencias oportunas para su identificación y esclarecimiento de las circunstancias del fallecimiento.
Nada más conocer que el cuerpo había sido localizado en el Bidasoa, el alcalde de Irun, José Antonio Santano, manifestó su profunda tristeza y dolor ante «un caso más de jóvenes en situación límite que llegan a nuestra ciudad buscando desesperadamente pasar la frontera, se juegan en ello la vida y acaba en tragedia». Ante este drama humano que se repite en aguas del Bidasoa por cuarta vez, Santano volvió a reclamar soluciones en las políticas migratorias europeas.
Una idea en la que coincidió el director de Migración y Asilo del Gobierno Vasco, Xabier Legarreta. «Desgraciadamente nos encontramos una vez más con la cara más dura y dramática del fenómeno de la inmigración en tránsito. Una vez solicitamos tránsitos seguros y humanizar este fenómeno», señaló. Denis Itxaso, delegado del Gobierno en Euskadi, afirmó que «aspiramos a flujos migratorios seguros, ordenados y legales que eviten una sola muerte más».
A falta de que se realice la autopsia y se confirme la identidad, las informacines preliminares sobre la víctima coincidirían con los datos que fueron encontrados en diversas pertenencias de Ibrahim Diallo. Durante el intenso rastreo de los servicios de emergencias durante los primeros cinco días, se halló diversa documentación. El joven senegalés había dormido la noche del viernes 11 al sábado en el recurso para migrantes de Hilanderas. Por la tarde, se lanzó al Bidasoa para intentar atravesar la frontera junto a otros dos migrantes. Ellos lograron su propósito, pero Diallo se quedó en el camino.
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