Adiós al viejo puente de Santa Elena

Noticia publicada en Diario Vasco sección Bidasoa el sábado 6 de Noviembre de 2010.

IRUN
Adiós al viejo puente de Santa Elena
Desde hace varios siglos ha existido, en este punto, alguna estructura para salvar el cauce de la regata. La construcción del nuevo paso sobre el canal de Dunboa se acometerá inmediatamente
06.11.10 - 03:06 -
IÑIGO MORONDO IRUN.

Casi como una construcción de Lego, pieza a pieza, se ha desmontado el puente de la calle Santa Elena sobre el canal de Dunboa. Claro que separar cada elemento del resto ha resultado algo más difícil que en el juego infantil. Una excavadora grande, una pequeña, un camión pluma y una máquina de corte especial, traída desde Barcelona, sumaron ayer sus esfuerzos a los de una decena larga de trabajadores para que hoy apenas quede rastro del viejo puente.

El proceso de obra ha durado, en realidad, varias semanas. Las primeras jornadas sirvieron para habilitar alternativas para las infraestructuras, especialmente para la red de agua, que salvaban el canal por el puente. Los dos últimos días son los que se han dedicado más concretamente a su destrucción.

«El jueves retiramos barandillas, aceras y asfalto, dejando sólo los enormes tubos antiguos y la losa del puente», explica Iñaki, uno de los responsablesde la empresa DC Construcciones en esta obra. «Hoy (por ayer), quedaba lo más complicado. Lo primero era picar los extremos de los tubos y sacarlos con el camión pluma. Luego, hacer dos cortes longitudinales en el puente con una máquina especial que hemos traído de Barcelona». En apariencia era como cualquier otra sierra para cortar asfalto, pero su disco tenía un diametro mayor, necesario para que el corte atravesara toda la losa. Dividida ésta en tres partes, los martillos hidraúlicos rompieron el hormigon junto a los estribos de una de ellas. El soplete fundió el forjado y la pieza se izó en manos del camión pluma. Hubo que repetir otras dos veces el trabajoso proceso para hacer desaparecer el viejo puente.

Ahora, inmediatamente, podrá arrancar la construcción del nuevo, con una anchura mayor para dar cabida a aceras mayores, bidegorri y dos carriles de circulación.

Enorme expectación

Centenares de personas cruzaban a diario ese puente que unía Arbes y la Parte Vieja. Ayer usaban la pasarela peatonal alternativa, colocada en paralelo días atrás. Resultó un observatorio inmejorable; en el caso de algunos peatones para un breve alto en el camino, en el de otros para pasar buena parte de la mañana. En un momento dado, cuando la pluma elevaba parte de la losa del puente había «10 personas currando y 30 mirando», calculaba uno de los espectadores.
Uno de esos 'mirones' era José Ramón Garmendia, autóctono de la Parte Vieja y algo más que aficionado a la fotografía. Jubilado ya, salió cámara en mano con la idea de plasmar en fotografías un momento que el consideraba «importante, como para fotografiarlo. Este puente lo recuerdo de toda la vida».

Lo cierto es que se pierde en los archivos desde cuándo existe un paso sobre la regata en este punto. Lo ha habido, al menos, desde que a comienzos del siglo XVI se construyera un pontón de madera. Posteriormente, la estrutura del paso ha ido variando y aunque puede haber habido algún cambio posterior, la última referencia se encuentra en un ensanchamiento de finales del XIX. «Las cosas que pasan una sola vez en tu vida, merece la pena verlas», sentenciaba Garmendia.

pie de fotos:
El derribo atrajo la mirada de muchos observadores a lo largo del día. :: F. DE LA HERA

Por piezas. El camión pluma eleva una parte de la losa del puente, durante el derribo de ayer. :: F. DE LA HERA

Pese a las grandes máquinas, parte del trabajo es necesariamente manual. :: F. DE LA HERA