"Irun debe aprovechar la oportunidad histórica de poder ordenar y regenerar con criterio toda la zona ferroviaria"

Noticia publicada en Diario de Noticias de Gipuzkoa sección bertan Txingudi-Bidasoa el domingo 26 de Diciembre de 2010.

José Félix Colado Álvarez Presidente de la Asociación Bidasotarra 7301 de Amigos del Ferrocarril
"Irun debe aprovechar la oportunidad histórica de poder ordenar y regenerar con criterio toda la zona ferroviaria"
José Félix Colado (o Koldo, como muchos le conocen) se define a sí mismo como "ferroviario", ya que fue el ferrocarril el que trajo a sus padres a Euskadi a trabajar y el que ha marcado su vida. Su trabajo de oficial de telecomunicaciones en Adif le trajo a Irun hace años
Xabier Sagarzazu - Domingo, 26 de Diciembre de 2010 - Actualizado a las 05:31h.

Irun. José Félix Colado y sus compañeros de la Bidasotarra 7301 han trabajado intensamente para preparar la exposición que por sexto año han instalado en un local de la estación de largo recorrido de Irun, dedicada este año a la industria auxiliar del tren en la ciudad, y en la que, además, pueden verse algunas de las maquetas y piezas que atesoran los socios de la entidad.

¿Cómo y por qué surgió la Asociación Bidasotarra 7301 de Amigos del Ferrocarril? ¿Qué tipo de personas la integran?
Junto con la Asociación de Amigos del Ferrocarril de Gipuzkoa, que tiene su sede en Donostia y los Amigos del Museo del Ferrocarril de Azpeitia, somos la tercera asociación de este tipo en el territorio y la más joven. Nacimos en julio de 2002 y nuestro objetivo principal se resume en uno: pasarlo bien y disfrutar del tren en todas sus formas, desde las maquetas hasta viajar en cualquiera de las unidades de hoy. Somos gente vinculada, o no, con el tren como medio de vida, pero que nos encantan desde las maquetas hasta los trenes grandes. Divulgamos el ferrocarril uniendo lo lúdico con su vertiente histórica y cultural.

¿De dónde viene su nombre? ¿Qué era el tren 7301?
La 7301 es una locomotora-prototipo que se construyó en CAF de Beasain en los años 30 y que estuvo en servicio en la línea entre Irun y Alsasua. Una locomotora muy innovadora para su época, ya que constaba de dos motores en cada uno de sus ejes y se electrificó por vez primera la línea para ponerla en funcionamiento. Fue un gran avance en su época y elegimos su nombre para distinguir a la asociación y por sus lazos con Irun. Esa locomotora es una joya y hoy se conserva en la estación de Delicias, en Madrid.

Estos días puede verse la exposición que organizan cada año. ¿Por qué siempre en Navidad y por qué la temática de la industria auxiliar?
Hacemos la exposición en Navidad porque es una época muy adecuada. Hace mal tiempo, los escolares están de vacaciones y los trenes son algo que atrae por igual a adultos y pequeños. Todos recordamos lo que nos maravillaba ver los trenes en la estación en nuestra infancia. Por eso, conjugamos nuestras maquetas a escala y con un tema más divulgativo o cultural. Otros años tuvimos exposiciones como la de Talgo o la de Transfesa, que fueron más ambiciosas y contaron con la colaboración de las empresas, que aportaron su material. Esta vez, todo es más modesto, pero hemos creído interesante recoger documentos que muestran la importancia de las industrias que rodean al ferrocarril en la historia de Irun.

¿Se puede decir en esto aquello de cualquier tiempo pasado fue mejor? ¿Cuánta gente trabaja hoy en Irun alrededor del ferrocarril?
Tenemos por un lado la planta de CAF, en la que se están fabricando unidades para trenes y metros de todo el mundo. También Talgo tiene presencia con talleres en nuestra ciudad y hay un importante trabajo en temas de mercancías de empresas como Algeposa o Transfesa. A todo esto, le sumamos los alrededor de 300 empleos de quienes trabajamos en la estación, desde las taquillas y talleres hasta las contratas de limpieza o seguridad. El ferrocarril sigue siendo importante en Irun, aunque hoy la ciudad tiene una diversidad mayor de actividades económicas e industriales.

Se están empezando a dar los pasos para regenerar todo el espacio ferroviario de la ciudad y para la llegada de la alta velocidad a Irun. ¿Cómo ven ustedes este futuro?
Irun va a tener una oportunidad histórica de reordenar todo el espacio que hoy ocupan las vías férreas en la ciudad, y de hacerlo con una operación de conjunto, en la que la estación intermodal de pasajeros va a ser uno de los ejes centrales. Hay que aprovechar esa oportunidad para hacer una reordenación y recuperación con criterio de toda la zona ferroviaria. Como ciudadano y como amante del tren, creo que es un futuro muy ilusionante. El tren es parte de la identidad de esta ciudad y lejos quedan los tiempos en que se decía que el ferrocarril era un invento diabólico y demás. El 15 de agosto de 2014 se cumplirán 150 años de la apertura de la línea Madrid-Irun-París, que se fue haciendo a retazos. Ahora, se puede hacer un diseño eficaz, práctico y útil para muchos años.

¿En los tiempos de la alta velocidad, queda algún resquicio para el romanticismo del tren?
El tren debe ser ante todo un transporte rápido, cómodo, eficaz y de un coste, a ser posible, razonable. Eso es lo que le importa al viajero, poder desplazarse de un lado a otro de forma rápida y cómoda. La nostalgia podemos dejarla para el Museo del Ferrocarril de Azpeitia, que es una joya que todos deberíamos visitar alguna vez.