BERTAKO GAIA
Una década como altavoz de Irun
EN DIEZ AÑOS DE VIDA, EL FORO CIUDADANO IRUNÉS HA BREGADO CON MIL TEMAS Y POLÍTICOS DE TODOS LOS COLORES
IRUN, XABIER SAGARZAZU - Martes, 26 de Noviembre de 2013 - Actualizado a las 06:08h
(N.G)
CORRÍA el año 2002 cuando el Ayuntamiento de Irun, entonces con Alberto Buen como alcalde, convocó el I Foro Ciudadano de Irun. Durante varios meses, entre enero y junio de aquel año, los ciudadanos que así lo desearon pudieron trabajar en grupos para expresar sus opiniones y propuestas en torno a la situación y el futuro de la ciudad, divididos en cinco grupos de trabajo: Eurociudad, movilidad y comunicaciones; desarrollo económico; bienestar y servicios sociales; urbanismo y medio ambiente; y cultura y ocio.
Todo ese trabajo se plasmó en el conocido como Libro Blanco sobre el futuro de Irun, una suerte de hoja de ruta sobre lo que los irundarras querían que fuera el porvenir de la ciudad con propuestas y acciones concretas. Propuestas cuyo impulso y cumplimiento quedaba, a partir de entonces, en manos de la clase política local.
Pero en 2003, una parte de las personas que participaron en aquel foro convocado por el Ayuntamiento de Irun se reúnen en el antiguo hospital y deciden organizarse. Redactan unos estatutos y se constituyen como el Foro Ciudadano Irunés, una entidad formada por gente muy diversa cuyo objetivo era "vigilar de cerca el cumplimiento y la evolución de los temas que se trataban en el Libro Blanco de Irun, porque no se podía dejar únicamente en manos de los políticos".
Así rememora aquellos momentos Agustín González, hoy presidente del Foro Ciudadano Irunés, que este mes ha celebrado con varias actividades su décimo año de vida.
González recuerda que "la constitución del foro como movimiento social pudo causar algo de sorpresa entre los políticos y gobernantes de la época en Irun, porque el concepto de la participación ciudadana no tenía tan buena estima como la tiene hoy en día y la mentalidad era muy distinta".
Elena Etxegoyen, entonces portavoz del PNV en el Ayuntamiento de Irun, señala que "el Libro Blanco tenía el valor de recoger propuestas e ideas que partieron de la ciudadanía" y corrobora que "sí pudo sorprender en la época que se constituyera el Foro Ciudadano Irunés". La exedil cree que "en el fondo, subyace la idiosincrasia irunesa", ya que "en Irun, históricamente, siempre ha habido un gran dinamismo social y de debate".
Etxegoyen tiene claro que "en muchos temas, la última palabra y la responsabilidad es de los políticos, sean gobierno u oposición", pero destaca el valor y la fuerza de movimientos como el Foro Ciudadano Irunés, "que propician el debate, que sacan temas a la agenda pública y que ponen organización a las opiniones y preocupaciones de la gente que, de otra forma, no llegarían".
Por su parte, Lucas Quintana, presidente de la federación de asociaciones de vecinos Oiasso 2000, destaca "la buena sintonía y la relación cordial" que mantienen con el foro, un movimiento que "ha hecho y hace una gran labor".
Desde hace diez años, el Foro Ciudadano Irunés ha tratado de "trabajar escuchando lo que dicen los iruneses en la calle y haciéndolo llegar a los políticos" y el colectivo, afirma su presidente, tiene claro que "el Ayuntamiento o los políticos no son el enemigo; se trata de intentar trabajar en conjunto con ellos y con el resto del tejido social de la ciudad", explica su presidente.
TIEMPOS Y RITMOS DISTINTOS
Empuje de otros movimientos
Agustín González cree que "por desgracia, los tiempos y velocidades de la gestión política no son los mismos que los del ciudadano, pero es necesario estar ahí para sacar los temas a la palestra para que les den la mayor prioridad posible".
Además de tratar de llevar a instancias de la administración la voz crítica y más dispersa en general de la ciudadanía, el Foro Ciudadano Irunés también ha sido germen de otros movimientos sociales. Agustín González pone como ejemplos "el surgimiento de la Plataforma en Defensa del Valle de Olaberria o la plataforma que se creó para pedir el desdoble de la carretera en Gaintxurizketa, impulsada por un grupo de amigos de la que fue última víctima mortal de accidente en esta zona".
El foro trató de "acompañar la creación de ambos movimientos: el de Olaberria sigue vivo y ha fomentado la conciencia de la importancia de este enclave rural y natural, y en el caso de Gaintxurizketa, por suerte, se consiguió el objetivo", recuerda Agustín González.
Entre las frustraciones y fracasos de esta década, el presidente del Foro Ciudadano Irunés lamenta "que no cuajara el intento, hace dos años, de convocar a las personas desempleadas de Irun para orientarles y acompañarles en el camino para que se constituyeran en asociación, tal como se estaba haciendo en numerosas localidades de toda Gipuzkoa y de Euskadi".
La cifra
· Áreas de trabajo. En su propia web (www.forociudadanoirunes.org), el foro explica que su actividad se centra en tres grandes temas, como son el urbanismo, el bienestar social y la cultura y el ocio.
· Tirones de orejas. Tienen una "buena y necesaria" relación con los políticos, pero eso no quita para que de vez en cuando el Foro Ciudadano Irunés les de un pequeño tirón de orejas que les saca los colores. En el último, sobre el nombre de Carlos Blanco Aguinaga para la nueva biblioteca de Irun, reprocharon al alcalde "las formas, que no buscara el consenso de entrada" con el resto de grupos, a los que afearon "su rápida respuesta crítica en este asunto, cuando en otros de importancia se deja sentir la falta de respuestas".
50
· Socios. Son los que tiene a día de hoy el Foro Ciudadano Irunés. Su presidente se muestra "satisfecho" con la cifra, pero lamenta que "la gente joven no dé el paso adelante para implicarse, para pasar de la protesta más o menos organizada en las redes sociales a una reunión para tratar de movilizarse por algún asunto que preocupa en la ciudad"
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