Estafan 110.00 euros a un vecino de Irun.
Detenida la pareja presunta autora del delito
Los hechos se iniciaron en mayo del pasado año y familiares y amigos del denunciante también se han visto salpicados por el engaño
SAN SEBASTIÁN. La Ertzaintza detuvo el martes en Irun a una pareja acusada de haber estafado un total de 110.000 euros a un hombre de la localidad fronteriza, al convencerle de que la mujer necesitaba ayudas económicas urgentes para evitar su ingreso en prisión y la pérdida de la custodia de su hija. La mujer, de 29 años, solicitó en los últimos siete meses dinero progresivamente a la víctima aduciendo que se lo devolvería al cobrar una ayuda pública que estaba esperando. Los hechos fueron denunciados por la víctima en diciembre, quien aseguró haber perdido más de cien mil euros en este tiempo, y esta semana se ha producido la detención de los responsables de la estafa que, además, tienen ambos antecedentes delictivos.
Los hechos se iniciaron en mayo del pasado año, cuando el denunciante conoció a una mujer y a su hija menor de edad. En posteriores encuentros, ella fue ganándose la confianza del varón, refiriéndole que se encontraba en situación de penuria económica y que debía hacer frente a diversas deudas, ya que de lo contrario ingresaría en prisión y perdería la custodia de su hija. Al mismo tiempo, aducía que estaba pendiente de recibir una ayuda económica de un organismo institucional.
El montaje se tradujo en sucesivas peticiones de dinero al ciudadano para sortear supuesto autos judiciales que emplazaban a la mujer a ingresar en prisión, situando a la víctima en la tesitura de seguir pagando para evitar que la mujer fuera a la cárcel y con ello perder las ayudas prometidas o dar por perdidas las cantidades que ya le había adelantado. De esta forma, la víctima se vio inmersa en una espiral de estafa continuada.
El cómplice, falso abogado
La estafa ha salpicado también en esos siete meses a familiares y amigos de la víctima, que ayudaron con diversas aportaciones de dinero. En los últimos meses, el desarrollo de los acontecimientos llegó a tomar tintes aún más graves con la aparición en la trama de supuestos narcotraficantes que exigían bajo amenazas de muerte el pago de una importante sumas económicas. Llegados a este punto, la víctima decidió finalmente denunciar los hechos a la Ertzaintza.
Los investigadores constataron pronto la naturaleza delictiva de los hechos al comprobar que los documentos facilitados por la mujer eran falsificaciones. El pasado martes la Ertzaintza localizó en el barrio de Azken Portu de Irun a la presunta estafadora, acompañada de un cómplice, un varón de 37 años, que en diversas ocasiones había contactado con la víctima haciéndose pasar por el abogado de la mujer.
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