El Gobierno local aprueba un gasto para modificar el Plan Especial de Korrokoitz
El objetivo es que la operación urbanística, que quedó paralizada por la crisis, arranque definitivamente
Los cambios son necesarios para hacer viable la financiación y gestión del proyecto
- MARÍA JOSÉ ATIENZA
- IRUN
La Junta de Gobierno Local ha autorizado un gasto de 72.600 euros para contratar la redacción de la modificación del Plan Especial del ámbito de Korrokoitz. Este Plan Especial, que proyectaba una operación urbanística de gran envergadura, fue aprobado por el Pleno en septiembre del año 2008, con el objetivo de transformar de forma radical una de las zonas más degradadas de la ciudad. Sin embargo, el acuerdo unánime de la Corporación, que había de posibilitar la puesta en marcha la operación coincidió con la llegada de la crisis económica y el proyecto quedó paralizado.
La Junta de Gobierno Local va a encargar ahora la modificación de este plan especial, con el fin de introducir una serie de cambios que puedan hacerlo viable. «Estamos hablando de la Parte Vieja de Irun, que es uno de los espacios de la ciudad que tenemos pendiente de transformación», señaló el alcalde, José Antonio Santano. «Se ha remodelado la plaza Urdanibia y vamos a reurbanizar la cuesta de San Marcial y el entorno del frontón, pero la mayor preocupación que tenemos ahora en la Parte Vieja son los espacios privados, donde desde hace tiempo se debería haber construido vivienda y donde hay edificios que no están en buen estado. Ése es un objetivo que el equipo de Gobierno tiene entre sus prioridades».
Para poder actuar en el ámbito de Korrokoitz era necesario «hacer algunas modificaciones en el Plan Especial», añadió el alcalde. «Vamos a encargar esas modificaciones y lo vamos a hacer hablando con los propietarios. Nos parece muy importante ir de la mano con ellos para que este proyecto arranque definitivamente». Los cambios que se van a introducir tienen que ver «con ordenaciones del espacio y con el tamaño de las viviendas. Vamos a ir a un tamaño algo menor y por lo tanto, podremos tener algunas viviendas más, sin modificar los aprovechamientos».
También se realizarán cambios en las cargas de urbanización y en las fases del proyecto «para que, desde el punto de vista financiero, la operación sea viable. Tenemos que abordar un número muy importante de realojos y para que se vayan produciendo tenemos que establecer unas fases que hagan posible la operación. El objetivo es lanzar en el espacio privado lo que estamos haciendo en el público».
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