Noticia publicada en Diario Noticias de Gipuzkoa, el jueves día 29 de Noviembre de 2018.

JOSÉ IRIGOYEN GARCÍA PRESIDENTE DE BIDASOAKO TXARANGA KULTUR ELKARTEA

“Queremos que la gente interactúe con los gigantes, que se acerque a levantarlos”

Bidasoako Erraldoiak cumple 30 años de vida en 2019 y lo celebrará con una serie de actividades que arrancarán mañana en el Espacio Palmera Montero

JON GUEZALA - Jueves, 29 de Noviembre de 2018 - Actualizado a las 06:03h

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José Irigoyen García, presidente de Bidasoako Txaranga kultur elkartea.

IRUN- Natural del municipio navarro de Carcastillo, José Irigoyen lleva casi tres décadas residiendo en Irun. Desde hace cinco años, además, es el presidente de Bidasoako Txaranga Kultur Elkartea, asociación más conocida últimamente como Bidasoako Erraldoiak. Su pasión por los gigantes le viene de la infancia, según confiesa.

¿Cúando y cómo nace Bidasoako Erraldoiak?

-Bidasoako Txaranga Kultur Elkartea fue fundada el 15 de marzo de 1989 y, en un inicio, era solo eso, una charanga que tenía como objetivo promover la música euskaldun. Sin embargo, al muy poco tiempo de empezar comenzaron a surgir nuevas ideas: se creó una orquesta de acordeones y se fabricaron los cuatro primeros gigantes de la asociación, una pareja de pescadores y otra de caldereros

Es entonces cuando usted entra en la asociación.

-Sí, más o menos, un año después. Me pareció muy curioso que no se bailasen aquellos gigantes como se hacía en Navarra, solo los paseaban. Pregunté si podía unirme a desfilar con ellos y me recibieron con los brazos abiertos. Cuando vieron que, además, podía bailarlos, pues había aprendido en mi juventud, alucinaron (ríe). Me pidieron que les enseñara y, poco a poco, fuimos añadiendo pasos y coreografías a los bailes.

¿Cómo llega a ser presidente?

-A mí la parte de Bidasoako Txaranga que siempre me ha interesado más es la de los gigantes, Bidasoako Erraldoiak. Con el tiempo el resto de áreas de la asociación, como la charanga en sí misma, han ido desapareciendo y desde hace seis años solamente nos dedicamos a la comparsa de gigantes y cabezudos. Hace cinco años se me presentó la oportunidad de acceder a la presidencia y estoy encantado, la verdad.

En 2019 la asociación cumplirá 30 años. ¿Qué han preparado para celebrarlo?

-En primer lugar, un acto que tendrá lugar mañana a las 19.00 horas, en el Espacio Palmera Montero. Allí presentaremos un calendario muy especial que hemos preparado en el último año. Cada mes está representado por uno de nuestros doce gigantes, y hemos tratado de que cada uno esté en su espacio natural. Nuestros gigantes pequeños representan las cuatro estaciones y los medianos los cuatro elementos, por lo que la relación con algunos meses es muy intuitiva. El fotógrafo Álvaro del Val Tobalina ha realizado una labor espectacular, todas las imágenes están tomadas en sitios muy reconocibles de la comarca del Bidasoa y casan muy bien con cada gigante.

¿Cómo se podrá conseguir el calendario?

-Estará disponible mañana en el Espacio Palmera Montero a precio de coste, cinco euros, aunque los interesados que no puedan acudir pueden ponerse en contacto con nosotros a través de nuestra web, bidasoako-txaranga-kultur-elkartea.com.

¿Qué tienen pensado de cara al año que viene?

-El evento principal será el sábado 8 de junio, en el que pretendemos celebrar una gigantada, trayendo a todos los gigantes de la comarca, de los alrededores y algunos más a Irun. Esperamos poder conseguir que en torno a 100 figuras se paseen por las calles de la ciudad en un ambiente festivo. Además, organizaremos una exposición repasando la historia completa de la asociación en el centro cultural Amaia, aunque aún no hemos concretado la fecha.

Irun será el año que viene el municipio guipuzcoano con más gigantes. ¿Cómo valora la noticia?

-Muy positivamente, claro. Es un placer colaborar con Ondare y con Atsegina en la recuperación de una tradición tan bonita en Irun.

¿Se vive la tradición de los gigantes de formas distintas en Gipuzkoa y en Navarra?

-Sin duda, aquí parece que la gente les tiene miedo, les cuesta mucho acercarse. En Navarra en cuanto se sacan gigantes a la calle enseguida se acercan niños y adultos a tocar las figuras, hasta se animan a entrar dentro cuando paran. Los más decididos incluso llegan a pedir levantarlos, que es cuando realmente se valora la labor de quienes los llevamos. Nuestra intención es fomentar ese tipo de relación con la tradición aquí también.

Gipuzkoando

Un monte. Aiako Harria tiene unas vistas epectaculares.

Una playa. La Concha.

Una fiesta. Las fiestas de San Marcial, aunque los sanfermines de mi tierra me llaman mucho.

Un paisaje. La bahía de La Concha vista desde Igeldo.

Su txoko favorito. Las ruinas del antiguo parador de Jaizkibel, siento que me transmiten mucha tranquilidad.