Escultura de la Etxekoandre. / Martín Tellechea
A comienzos de este año, y ante los daños que ha venido en ocasiones sufriendo la escultura de la Etxekoandre situada en la plaza de Urdanibia, el Ayuntamiento de Irun quiso lamentar unos hechos que se han detectado en varias ocasiones (la última hasta la fecha este pasado fin de semana) y que han acabado con la vara metálica de la escultura dañada. Se pide respeto por una figura que busca mantener vivo el recuerdo de la plaza, su entorno y por extensión, toda la ciudad, con el mundo rural y el mercado de ganado.
La Policía Local ha venido atendiendo estos hechos y realizando actuaciones en el lugar, sin ir más lejos este pasado fin semana con el último caso detectado. A través de las cámaras ubicadas en la zona, agentes municipales observaron cómo una persona doblaba la vara de la Etxekoandre; desplazados al lugar, y con los datos ofrecidos por la grabación, la Policía Local pudo identificar a la persona que se encontraba en las inmediaciones y hacerle entrega de un acta de denuncia por “deteriorar mobiliario urbano”, una infracción sancionada con 200 euros. La Policía Local seguirá vigilando y controlando la figura para evitar que se dañe.
Colocada en abril de 2015, la obra del escultor Tomás Ugartemendia está inspirada en el cuadro “Etxekoandre del caserío Berroa”, del pintor irundarra Vicente Berrueta. Es un lienzo de propiedad municipal e instalado en la Sala Capitular del Ayuntamiento. La reproducción en piedra, que incluye tanto a la “Etxekoandre” como los bueyes que le acompañan en esta pintura, es un elemento que forma parte de la renovación que supuso la reurbanización de la plaza Urdanibia; una nueva imagen que, no obstante, no quiere olvidar su historia ligada, en este caso concreto, al papel de la mujer en el mundo rural.