Santiagotarrak, listo para volver a empezar
PIRAGÜISMO Y REMO
El club irundarra ha retomado esta semana la actividad en sus instalaciones en grupos pequeños y con restricciones
Más de dos meses después del cierre de sus instalaciones, la Sociedad Deportiva Santiagotarrak ha empezado esta semana su particular desescalada. Los integrantes de los equipos sénior y juvenil han retomado los entrenamientos presenciales en grupos reducidos para evitar aglomeraciones y el resto de las categorías lo hará de manera paulatina próximamente.
El presidente del club irundarra, Antxon Arellano, apunta que «iremos evaluando cómo funciona todo. El gimnasio únicamente estará operativo para los deportistas de alto nivel del club y la apertura de los vestuarios será el último paso de todos». En cuanto al resto de usuarios que guardan su embarcación en el hangar, «se habilitará un sistema de cita previa para que no haya masificaciones».
Santiagotarrak ha estado trabajando en los últimos dos meses para adaptarse al nuevo contexto. Pensando en el día en el que pudiesen volver a abrir sus puertas, el club desinfectó toda la instalación y tomó medidas como la de colocar gel hidroalcohólico en zonas comunes. «Sabíamos que este momento iba a llegar y nos hemos ido preparando».
Ahora que parece haber pasado lo peor, el dirigente de Santiagotarrak recuerda cómo fueron los días posteriores al 13 de marzo, la fecha en la que quedaron suspendidas todas las actividades deportivas. «Nos pusimos a trabajar para intentar minimizar daños. Vimos qué opciones teníamos para que un pequeño colectivo del club pudiese seguir entrenando». Santiagotarrak ha estado en contacto en todo momento con el Ayuntamiento de Irun para «tratar de desatascar la situación» y que «los deportistas de alto nivel pudiesen ejercitarse».
Entrenamientos limitados
Las normativas del Gobierno abrieron la puerta a esa posibilidad y «los deportistas del alto nivel reconocidos» han podido entrenar en las últimas semanas. Arellano explica que «los que han pasado el confinamiento en Irun han entrado al agua de una manera muy restringida. No han podido hacer uso ni del gimnasio ni del vestuario. Simplemente accedían al hangar, recogían su embarcación y hacían su entrenamiento. Acudían cambiados y marchaban directamente».
Esa selecta lista de deportistas del club que se encontraban en la ciudad y obtuvieron el permiso fueron los piragüistas de aguas bravas Ander Elosegi y Klara Olazabal, los de pista Aitor Gorrotxategi y Nerea García y la remera Aitzpea González.
Todos ellos están trabajando con la incertidumbre de no saber si volverán a la competición durante la presente temporada. «Ahora parece que se está despejando algo el panorama», reconoce el presidente del club de remo y piragüismo. «Me imagino que empezaremos a tener más información al respecto. Las competiciones internacionales se están planteando su celebración para octubre. En el caso del remo, por ejemplo, el Europeo sub23 se contempla para ese mes. Del Mundial no se sabe nada todavía».
El ergómetro, «una tortura»
Entrenar entre cuatro paredes no ha resultado una tarea sencilla pero el club ha intentando que los suyos pasasen el trance lo mejor posible. «Los integrantes de los equipos sénior, júnior y parte de los cadetes tuvieron la posibilidad de llevarse los ergómetros y algo del material del gimnasio. Es una tortura hacer ergómetro en casa pero por lo menos ha servido para mantener una dinámica de entrenamientos. Algunos los hemos hecho de manera conjunta por videoconferencia para mantener el contacto».
El club irundarra se ha mantenido muy activo durante el confinamiento en redes sociales. Ha publicado vídeos, sus remeros y remeras han contado cómo han vivido la cuarentena y hasta han disputado una regata online con el club Ur Kirolak de Donostia. «Ha ido todo un poco en la misma línea, la de intentar mantener la motivación y permanecer en contacto», señala el presidente. «Es muy complicado que la gente entrene sola en su casa sin tener la seguridad de que lo que están haciendo sirve para algo. No sabemos si la temporada va a terminar o no. Por eso hemos intentado que se hiciese lo más ameno posible».
Las colonias, en marcha
Santiagotarrak tiene abierto el plazo de inscripción para sus colonias de verano. Durante las últimas semanas su celebración ha parecido complicada pero ahora son «cada día más optimistas». Antxon Arellano cuenta que «estaba todo muy avanzado cuando estalló el tema del coronavirus. Tenía muy mala pinta pero aún así decidimos lanzar las preinscripciones. Nos arriesgamos y a día de hoy lo vemos factible. Será con muchas restricciones y en grupos pequeños, pero creo que podremos sacarlo adelante».
Todos aquellos que quieran disfrutar del verano con Santiagotarrak pueden consultar la oferta en la página web uda2020.santiagotarrak.com. La inscripción no se cobrará hasta que se puedan confirmar las actividades.
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