Basura en pleno paraíso
Entornos naturales. Durante los meses de verano ciertos puntos naturales de Irun se han visto afectados por la falta de civismo de algunos ciudadanos
En las últimas semanas las redes sociales se han inundado de imágenes y vídeos de escenas que, desgraciadamente, se han vuelto comunes. Parece ser que se ha puesto de moda ensuciar la ciudad, realizando quedadas, picnics y botellones y, después, no recoger nada de la basura generada. Estas acciones se dan en entornos naturales como Erlaitz e Irugurutzeta, en bidegorris y en cualquier esquina donde estos individuos no se sientan señalados.
Para evitar ver al día siguiente escenas bochornosas como la de las imágenes que acompañan a este reportaje, Servicios de Txingudi adoptó la medida de aumentar los días de recogida de basura en Erlaitz y poner más contenedores, pasando de tres a cuatro, en la zona de barbacoa y en el punto de información de Lapurriturri. Leire Zubitur, gerente de la entidad, apunta que «hasta el año pasado se recogía una vez a la semana y se limpiaba la zona otro día. Ahora se recoge martes y domingos y la limpieza se realiza los viernes, de tal forma que así pueda estar medianamente bien, pero hay días puntuales en los que se genera mucho residuo».
Zubitur recalca que «no va a estar más limpio por poner más medios, sino porque la gente sea consecuente y deposite la basura en su lugar». Pide la «colaboracion ciudadana» para que esos puntos sean «espacios limpios» y evitar así «comportamientos incívicos».
Poniendo sobre la mesa datos del mes de junio, en 2019 se recogieron 2.200 kilos de residuos (muy similar al de años anteriores), mientras que en dicho mes de 2020 la recogida ascendió a 3.800 kilos, prácticamente un setenta por ciento más. «Comparando con otros años, la afluencia de gente este año es mayor e influye mucho el momento actual, donde mucha gente no se ha ido de vacaciones y decide disfrutar del verano en entornos naturales».
En esas zonas rurales, donde conviven animales, existe el peligro de que vayan buscando comida. Al encontrarse basura en el suelo, junto al contenedor, no dudan en rastrear, lo que hace que se puedan topar con cristales y los residuos sean esparcidos por la zona. Jon Ugarte, delegado de Vía Pública del Ayuntamiento de Irun, pide que en caso de que el contenedor esté lleno «no depositen la basura en el suelo; al igual que han subido la bolsa pueden bajarla a la ciudad perfectamente».
«Vivimos en un paraíso»
Ugarte resalta que «es importante que la gente se conciencie y que la sociedad vaya hacia caminos cívicos; conservemos nuestro entorno porque es de todos y el patrimonio de los ciudadanos de Irun es muy grande». Pide que la ciudadanía actúe como si estuvieran en su propia casa: «es fácil, sencillo y se puede hacer en la vida diaria sin ningún impedimento».
En la comarca del Bidasoa existe una entidad que trabaja en la concienciación y limpieza de espacios naturales. Laida Rodríguez, Gorka Alcantarilla y Rober Serna formaron en 2018 la Asociación Recicla_Birziklatu para «echar una mano a la naturaleza y que, así, también nosotros nos beneficiamos encontrándonos el entorno limpio», explica Rober Serna.
Desde la asocación apuntan que todos los agentes sociales deben ir de la mano «ya que vivimos en un paraíso y es por el bien común. Tenemos que cuidar esto». Serna pone un claro ejemplo para que la ciudadanía se preocupe de la basura que genera: «Si subes tu móvil luego lo bajas, ¿no? Con la basura pasa lo mismo: si vas a un entorno natural te tienes que hacer cargo de lo que subes y al igual que lo subes debes bajarlo». Añade que «la gente tiene la conciencia de que como lo que sube al final termina siendo basura, ya no se hacen cargo de ello».
Desgraciadamente, estas imágenes llevan tiempo repitiéndose y está en manos de todos cuidar nuestro 'paraíso'.
No hay comentarios:
Publicar un comentario