Noticia publicada en Diario Vasco,el jueves día 2 de Diciembre de 2021.
Preparados para un accidente aéreo en Hondarribia
Los equipos de emergencia llevan a cabo un simulacro en el aeropuerto
Un avión de mediano tamaño enfila la pista 22 del aeropuerto de Hondarribia para aterrizar. Pero una racha de viento desestabiliza el aparato, que se sale de la pista y comienza a arder. Dentro, viajan cuatro miembros de la tripulación y cinco pasajeros. La catástrofe, simulada, ha activado esta mañana a todos los equipos de emergencia para medir la capacidad de reacción, la coordinación y la eficacia en caso de un incidente real. Un ejercicio enmarcado en el plan de autoprotección del aeropuerto de San Sebastián, a su vez dentro del Plan de Emergencias Aeronáuticas de Aena y que exige revisiones periódicas. Hondarribia ha superado la prueba.
La alerta llegaba cuando el avión que realizaba la aproximación a la pista por la cabecera 22, procedente del mar, pierde la estabilidad por una racha de viento, se sale de la pista y se incendia. Como consecuencia del impacto, se rompe el fuselaje y el combustible se derrama, lo que provoca el fuego en el lado derecho exterior de la aeronave y se quema parte del motor y del propio fuselaje. Según el relato realizado desde Aena, la torre de control acciona en ese momento la alarma del servicio de extinción de incendios del aeropuerto y facilita a los bomberos todos los datos sobre el avión siniestrado. Mientras, el centro de operaciones avisa al 1-1-2 de SOS Deiak que pone en marcha al resto de equipos de emergencia para atender a los pasajeros y sofocar el incendio para evitar que se propague.
Los bomberos del aeropuerto apagan el fuego con el lanzamiento de espuma mientras aseguran el área crítica del avión, y una vez controlado, junto a bomberos de Gipuzkoa, rescatan a los heridos del interior. Durante esos primeros minutos van llegando el resto de equipos de emergencia, que atienden a las víctimas, tanto las que se encontraban cerca de la aeronave como dentro.
En el área de socorro, se clasifica a los heridos según su gravedad para determinar la prioridad de atención y de traslado a un centro sanitario, tras su estabilización. El balance es de dos personas muy graves, otros tres heridos graves y cuatro ilesos.
El simulacro ha contado con la participación de todos los medios del aeropuerto, desde la dirección, torre de control, servicio de extinción de incendios (SEI), operaciones, mantenimiento, handling, Guardia Civil y vigilancia privada. Y de equipos de emergencia externos como el 112, el servicio vasco de Salud, Ertzaintza y bomberos de Gipuzkoa. «En el simulacro de hoy se han analizado los tiempos de reacción y respuesta de todos los colectivos implicados», explica Aena. El gestor aeroportuario estatal explica que con este ejercicio el aeropuerto de San Sebastián «cumple con la normativa de la Organización de Aviación Civil Internacional (OACI) en materia de planificación de emergencias y atiende» a la legislación vigente, que exige a los aeropuertos contar con planes de autoprotección.
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