Noticia publicada en Diario Vasco,el lunes día 27 de Junio de 2022.
Las cuadrillas elevan la intensidad de las fiestas
Koadrila Eguna. La Herri Bazkaria volvió a celebrarse con ambientazo y un novedoso e interesante evento previo: goitiberas por la cuesta San Marcial
En 2009 Betti Gotti Euskara Kultur Elkartea cambió el patrón del sábado de fiestas. Organizó una comida popular en el frontón Uranzu para 600 personas. Este sábado, en Ficoba, la Herri Bazkaria se celebró con el triple de comensales, pero las cuadrillas se repartieron, además, por bares y restaurantes de toda la ciudad que en muchos casos ya promocionan sus propuestas para este día bajo el nombre de 'Menú Koadrila Eguna'.
El espíritu inquieto que motivó a Betti Gotti hace 13 años para dar ese paso que iba a cambiar la manera de enfocar los sanmarciales para los jóvenes (y no sólo los jóvenes) de la ciudad ha seguido vivo todo este tiempo y no ha dejado de innovar: kalejira de ida a Ficoba y luego también de vuelta, olinpiadas de koadrilas, concierto para la sobresa... Ayer la música en directo la puso Gozategi, que está de gira por su 30 aniversario, pero no fue lo único destacado de una jornada en la que se puso en marcha el que puede ser un nuevo hito sanmarcialero.
Lanzados cuesta abajo
Para el regreso de este día de cuadrillas tras dos años de parón, Betti Gotti propuso recuperar un evento de otra época: la bajada de la cuesta San Marcial con goitiberas. Aunque vestía el ambicioso nombre de Gran Premio Ciudad de Irun de Goitiberas, se trataba de una experiencia piloto para ver cómo calaba la idea. Que amaneciera lloviendo pudo haber invalidado el ensayo. El asfalto mojado en la empinada cuesta podría desalentar a los participantes y las dudas de que en esas condiciones se llegara a celebrar, dejar a muchos potenciales espectadores en casa.
Seguro que eso pasó, pero a pesar de todo, hasta 43 valientes se inscribieron, algunos de ellos con goitiberas fabricadas por ellos mismos y el resto dispuestos a usar las que facilitaba la organización. Muchísimas personas se acercaron a ver en qué resultaba el experimento y no se fueron defraudados.
Cada participante pudo hacer dos bajadas de prueba y una cronometrada. El primero de los ensayos fue en pura línea recta para medir la pendiente. Para el segundo, con fardos de paja se marcaron un par de chicanes justo antes del cruce con la calle Sargía y empezó el espectáculo de verdad. En la ronda cronometrada, los competidores pusieron lo mejor de sí y recibieron los aplausos y los gritos de ánimo del público, que no sólo iba creciendo en número sino que iba elevando su entusiasmo y sus vítores.
Unai Arretxe, que era de los que había fabricado su propia goitibera, marcó el mejor tiempo con 24,67 y tiene el honor de ser el primer ganador de este gran premio que recupera una vieja tradición y seguramente esté consolidando un nuevo referente de las fiestas. En una pugna entre ellos resuelta en centésimas de segundo, completaron el podio Iñaki Salaberria (27,21) y Jon Farea (27,23).
La organización felicitó a los participantes y les agradeció su empeño en que esta primera edición fuera un éxito. Les invitó a seguir en contacto para establecer un marco normativo de fabricación de goitiberas para el año que viene y, aunque queda fuera de su esfera competencial, prometió tratar de evitar que vuelva a llover el sábado de los próximos sanmarciales.
Ayer, el mal tiempo se compensó con el buen clima entre el medio centenar de participantes que fueron juntos a Aia Taberna a celebrar su triunfo colectivo con un pintxo y un trago cortesía de los organizadores. Todo antes de coger la kalejira que les llevaría a Ficoba para la Herri Bazkaria y la posterior (larga) fiesta.
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