Una investigación iniciada en Irun se salda con un detenido por sextorsión
El acusado, con domicilio en Palma de Mallorca, se hacía pasar por una mujer para conseguir fotografías íntimas
La Policía Nacional de la Brigada Local de Policía Judicial de Irun inició una investigación que se ha saldado con la detención, en Palma de Mallorca, de un hombre por lucrarse al extorsionar y amenazar a varias víctimas con difundir imágenes y videos de contenido sexual.
Según ha informado la Delegación del Gobierno en el País Vasco, agentes de la Policía Nacional de Irun llevaron a cabo un investigación iniciada a raíz de una denuncia de un joven que manifestó "estar siendo víctima de un chantaje".
Inició en Instagram
Según lo relatado por el denunciante, todo comenzó con un mensaje que recibió a través de la red social Instagram, de un contacto de un desconocido que había aceptado unos días antes, en el que aparecía la foto de perfil de una mujer.
La supuesta mujer le propuso continuar sus conversaciones a través de Telegram, donde aparecía asociado su perfil a un teléfono extranjero. En el desarrollo de las conversaciones este contacto le propuso intercambiar con el joven imágenes y videos de contenido íntimo a lo que él accedió.
Posteriormente le exigió el pago de 500 euros a través de la plataforma Bizum, "amenazándole si no hacía el ingreso, con difundir entre sus contactos y conocidos esas imágenes comprometedoras, perjudicando así su imagen personal".
Detenido en Mallorca
Agentes de la Brigada de Policía Judicial llevaron a cabo diferentes gestiones de investigación que culminaron con la localización e identificación, como receptor de los ingresos derivados de la sextorsión, de otro joven con domicilio en Palma de Mallorca, el cual fue detenido por delito contra la intimidad y amenazas.
Este investigado manifestó, a su vez, ser una víctima previa de hechos similares, si bien continuó como intermediario de la recepción de pagos de otras 13 víctimas a través de la plataforma de Bizum, por un importe total de 4.804,39 euros, que posteriormente transfería a una billetera de criptomonedas bajo el control de la mujer que iniciaba los contactos para extorsionar a las víctimas. La investigación continúa abierta y no se descarta la localización de nuevas víctimas y más detenciones.
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