Las Juntas Generales de Gipuzkoa han dado este miércoles seis meses de plazo para que dos proyectos estratégicos deportivos de Irun, el multiusos de Ficoba y las pistas de Txenperenea, tengan cerrados los acuerdos interinstitucionales que faciliten su financiación. Así se lo han reclamado por unanimidad tanto a la Diputación como al Gobierno Vasco y al central.

La iniciativa, que ha llegado al Pleno con la unanimidad de las portavoces, consta de dos puntos: el primero, el relativo al multiusos de Ficoba y que insta a la institución foral y a los gobiernos de Vitoria y Madrid a que colaboren con el Ayuntamiento de Irun “para llevar a cabo el proyecto y la adopción de los compromisos de financiación necesarios para el desarrollo del mismo, en un plazo de seis meses”.

Mismo plazo que otorgan en el segundo punto para renovar los convenios que el Gobierno de Lakua, el foral y los ayuntamientos de Irun y Hondarribia firmaron en 1993, y poner en marcha “el anteproyecto de las futuras instalaciones deportivas que se ubicarán en Txenperenea, para trasladar así las actividades deportivas de Plaiaundi”.

Más allá de los pequeños reproches de inacción que en el caso de Plaiaundi los portavoces se han cruzado recordando sus distintas responsabilidades institucionales salvo el PP, el debate ha estado marcado por la celebración de la unanimidad.

Echeveste: “Que en seis meses se hagan los estudios que hay que hacer”

La portavoz de Elkarrekin Gipuzkoa, proponente de la propuesta, ha dividido su intervención en los dos puntos de la resolución. “Referente de Euskadi, así como estatal y europeo, el Bidasoa desde hace unos años asiste a un futuro incierto”, ha señalado Echeveste sobre un club que juega en Artaleku, “instalaciones deportivas construidas en 1987 que no están pensadas ni preparadas para un club de esta categoría”. Respecto a Plaiaundi, ha denunciado “el historial de buenas palabras y compromisos políticos inconclusos”, y ha exigido al área de Deportes que responda al “anteproyecto que está sobre la mesa desde noviembre de 2023”: “Nos preocupa mucho, porque nos lleva a pensar que no están dispuestas a participar en el proyecto a menos que sea más modesto, más pequeño y menos costoso”.

Para ambos proyectos, Echeveste ha exigido que “en seis meses se hagan los estudios que haya que hacer y se ponga el presupuesto que haya que poner, entiendo que para el presupuesto de 2026. Menos hablar y más firmar”.

Manrique: “El papel lo aguanta todo”

Tras un emocionado recuerdo al exdirigente del PP Manuel Michelena fallecido hace escasas fechas y por quien se ha guardado un minuto de silencio, el juntero Iñigo Manrique ha pedido “disculpas” a los clubes que “tantos años se han mantenido en esas instalaciones contra viento y marea”.

De la misma manera, Manrique ha advertido que con la unanimidad de esta propuesta de resolución han hecho “lo más fácil, aun siendo difícil el acuerdo. El papel lo aguanta todo y puede acabar siendo mojado, es el momento de hacer cosas y dejarnos de cosas que no son las importantes”.


Plano de 2018 de cómo quedaría la ordenación de Txenperenea, con la zona deportiva al oeste (a la izquierda) y la zona residencial a la derecha en la imagen. N.G.

Marañón: “Respuesta desde las instituciones”

La siguiente en intervenir en orden de menor a mayor representación ha sido la socialista Arritxu Marañón, diputada foral de Deportes entre 1995 y 1999. “Irun es una ciudad referente en el territorio guipuzcoano que siempre ha estado a la vanguardia y así debe continuar y quiere continuar”, ha expresado, recordando que está elegida para la Fase Final del Mundial femenino de balonmano de 2029.

Marañón ha reconocido además que “para que haya un futuro, es necesario adecuar sus espacios a los tiempos actuales dando una respuesta desde todas las instituciones públicas para que ese caudal deportivo y cultural no se pierda”.

Garay: "Un paso importante para los dos proyectos"

El juntero jeltzale, Ander Garay, se ha sumado al agradecimiento de otros portavoces a los representantes de los clubes y de la Corporación como el teniente de alcalde, Gorka Álvarez, por haber acudido a las Juntas, “lo que demuestra la importancia del punto que tratamos”.

Entre su intervención inicial y en la posterior réplica, el portavoz jeltzale en la materia ha puesto en valor que con esta resolución se da “un paso importante para dos proyectos estratégicos en Irun. Por un lado, porque el Bidasoa, un club de balonmano histórico, necesita para competir en Europa y desarrollar su proyecto deportivo”; y por otro lado, porque el traslado a Txenperenea saldaría una “deuda histórica” con el Bidasoa Atletiko Taldea y el Txingudi Rugby Club, amén de culminar un traslado “pendiente desde 1993 y poder recuperar el ecosistema”.

Melida: “No podemos hacer esperar más a los clubes”

También en euskera, como Garay, el juntero de EH Bildu Jokin Melida ha incidido en los seis meses que fija la propuesta de resolución: “Haber fijado un plazo le da un gran valor al texto, porque si aprobáramos un texto sin plazos, sería volver a caer en el engaño”.

“Nuestro grupo juntero hace una apuesta inequívoca por abrir este pabellón, que debe ser referente en el territorio y no se puede demorar en el tiempo”, ha señalado el juntero soberanista, antes de abodar que “cuando hablamos de equilibrio territorial, hay que tomar en cuenta todas las realidades de Gipuzkoa: Irun es la segunda ciudad y limita con Hondarribia, Nafarroa y Lapurdi. Es un lugar estratégico para una instalación así”.

Respecto a Txenperenea, Melida ha insistido en “otra deuda histórica que se tiene con nuestra ciudad y nuestra comarca”. “No podemos hacerles esperar más”, ha señalado, en referencia a los tres clubes implicados, que “han tenido paciencia de sobra y es la hora de darles una alternativa, una respuesta tajante y definitiva por parte de los que estamos aquí y en otras instituciones”.

El pabellón de Ficoba: se acaba el tiempo

En el caso del pabellón multiusos, la solicitud se dirige sobre todo a las dos últimas instituciones, toda vez que la Diputación previó ya hace año y medio 14 millones de euros. Los presupuestos de 2024 no vieron la luz, pero dichas partidas plurianuales ya han sido incluidas en el del año en curso, con los primeros 50.000 euros y compromiso de otros 6 millones en 2026.

Con un proyecto inicial en un coste estimado en 43 millones, faltan por cerrar los últimos detalles del proyecto, los que más cuestan como ha evidenciado la resolución de las Juntas, sobre cuyo retraso empieza a haber inquietud social al tener que responder a la demanda deportiva de la ciudad, con más horas de pista, y su financiación, tanto la parte correspondiente al Ayuntamiento como a otras instituciones y posibles agentes privados.

En este sentido, hace una semana la diputada de Deportes, Goizane Álvarez, recordó la partida presupuestaria aprobada e interpeló en Teledonosti al Gobierno municipal irundarra, liderado por la socialista Cristina Laborda en coalición con el PNV: “El impulso es local y nosotros acompañamos económicamente”.

“No sé si existen otras variables para llevarlo a cabo en tiempo y forma que está previsto, pero ese titular de periódico de Y ahora, Europa, necesita un pabellón”, aseguró en la entrevista de Teledonosti, donde soñó con un Bidasoa que vuelva “a ser campeón de Europa”: “Para crecer en Europa, 30 años después ya toca darle al Bidasoa su lugar, un espacio donde pueda crecer. Estamos en la muga de otro país donde hay gran afición por el balonmano y que en la proximidad no gozan de estas instalaciones, por lo que puede permitir una estrategia internacional”.


Exterior del pabellón multiusos IAM de Ficoba, en Irun I.U.

La “deuda histórica” del traslado de Plaiaundi

Si el pabellón de Ficoba se hace imprescindible por el crecimiento de las distintas modalidades deportivas de Irun, también del Bidasoa, así como para que la ciudad pueda seguir acogiendo las distintas competiciones, el traslado de las pistas de atletismo y rugby de Plaiaundi es la pesadilla de nunca acabar.

El proyecto de Txenperenea responde a la eterna promesa incumplida de trasladar las pistas de una zona de especial interés natural. Entonces en la oposición, PNV, EH Bildu y Podemos Irun aprobaron la ubicación de Txenperenea, un emplazamiento que entre las diferentes alternativas ha tenido en su coste uno de los puntos desfavorables.

Como recuerda la resolución aprobada en las Juntas, el año 1993 se adoptó un acuerdo interinstitucional para financiar el traslado de las pistas.

Tanto el temor por el coste, expresado por Miren Echeveste, como la necesidad de renovar el convenio de 1993, recogido en la propia propuesta de resolución, son dos aspectos que han estado presentes en el debate parlamentario y que en los próximos seis meses deberán tener respuesta. Ya hay otro nuevo reloj en marcha.