El promedio de los meses de agosto desde 2004 hasta 2022 había
sido de 21.302 pasajeros si tenemos en cuenta los años atípicos de 2020 y
2021, con 7.848 y 19.766 pasajeros cada uno. Sin estos dos veranos
marcados por la pandemia, esa media asciende a 23.100 viajeros, algo que
queda pulverizado en 2022, con 42.231 personas usuarias del aeródromo.
Doce meses más tarde, el aeropuerto ha visto aterrizar o despegar a
49.332 personas, lo que lleva el acumulado de los ocho primeros meses hasta los 317.885 pasajeros.
A falta de cuatro meses para cerrar el año supone superar el total del año completo registrado en 15 años desde 2004.
Tras quedarse en 2022 a 20.000 pasajeros de la segunda marca histórica
(los 403.000 de 2008), la progresión invita a pensar que podría
superarla este 2023 y mirar al récord absoluto, los 466.500 pasajeros
del año 2007.
Si atendemos al comportamiento habitual del último tercio del
año, observaremos que la media de viajeros desplazados ronda los 100.000
pasajeros, un cálculo que si no se cuentan los dos años de la pandemia
ascendería hasta los 130.000. A botepronto, tras la caída de agosto, los precedentes invitan a pensar que septiembre será un mejor mes, ya que en toda la serie histórica que arranca en 2004 el noveno mes ha mejorado al octavo.
Récord de destinos
La apuesta de las distintas aerolíneas por mantener y ampliar
tanto destinos como frecuencias ha encontrado respaldo de los usuarios,
bien los que salen de Gipuzkoa como los que quieren llegar. Madrid, Barcelona, Las Palmas de Gran Canaria, Valencia, Málaga, Sevilla, Palma de Mallorca, Mahón y Londres han conformado una lista de destinos también récord.
Buena parte de la oferta salvo la capital británica se mantiene
estable hasta octubre, cuando Volotea cese sus conexiones con las Islas
Baleares. Hasta noviembre aguanta Málaga, que tiene previsto su regreso
en Navidades, mientras que la aerolínea de bajo coste con base en
Asturias mantiene en cartel Sevilla y Valencia. La principal novedad de
la temporada de invierno la ofrece British Airways a través de su filial
Cityflyer, que tras anunciar que en verano de 2024 volverá a conectar
Gipuzkoa e Inglaterra, ha prolongado las conexiones hasta finales del
año.
La ligera reducción de frecuencias entre Hondarribia y Madrid,
que suele ser habitual en agosto al caer la demanda vinculada al mundo
la empresa y se recupera en septiembre, no se ha dejado notar en exceso,
y el aeropuerto guipuzcoano se anota su mejor agosto. Lo hace con un
total de 602 operaciones, apenas tres más que en el octavo mes de 2022 y
62 más que en 2019; lejos, eso sí, de las más de 900 al mes que eran
habituales en los agostos de entre 2004 y 2008.
En cuanto al resto de aeropuertos vascos, tanto Loiu como Foronda y Noáin cierran
agosto en positivo. El aeródromo vizcaino gana un porcentaje pasajeros
similar al de Hondarribia, con un crecimiento interanual del 16,1% y
alcanza los 664.000 viajeros; Vitoria salta un 36% hasta los 37.000
mientras que el aeropuerto navarro sube un 8,3% y se sitúa en 16.500
personas.