Noticia publicada en Diario Vasco sección Economía el sábado día 21 de Enero de 2012.
ECONOMÍA
Los ayuntamientos de Gipuzkoa asumen que no podrán cumplir sus planes presupuestarios
Se ven abocados a plantear nuevos ajustes al nacer obsoleta la aportación de la Diputación. La recaudación fiscal de 2011 se queda en Euskadi en 11.480 millones, 1.020 menos de lo previsto, y reduce los recursos disponibles
21.01.12 - 02:42 -
El año no ha hecho más que comenzar y los alcaldes de los 88 ayuntamientos de Gipuzkoa tienen asumido que sus planes de ingresos y gastos para este año son ya papel mojado. Los ediles van a tener que repensar sus inversiones y meter más tijera aún a los gastos previstos, completando así el círculo de los ajustes que marcarán el año 2012 (Gobierno central, Gobierno Vasco, diputaciones y ayuntamientos). Las corporaciones locales que tienen ya aprobado su Presupuesto para este año deberán dar una nueva vuelta de tuerca al capítulo de gastos para reducirlo más que lo que plasma el papel. Los que no han cumplido el trámite aún, no tienen más remedio que rediseñar sus cuentas.
La explicación es sencilla. Casi la mitad de un presupuesto municipal (entre un 40% y un 45% como norma general) lo cubre la Diputación a través del Fondo Foral de Financiación Municipal (Fofin). La cuantía provisional de este fondo y su reparto por municipios se establece en octubre, en base a la previsión de ingresos fiscales que el Gobierno Vasco y las diputaciones establecen para el año siguiente en el Consejo Vasco de Finanzas. Se trata de un ingreso a cuenta vinculado al dato de recaudación final. Si esta supera esas previsiones, los ayuntamientos reciben una 'paga extra'. Si se queda corta, toca devolver dinero a la Diputación.
396 millones «irreales»
El Fofin anunciado para este año en Gipuzkoa, y sobre el que los ayuntamientos han elaborado sus presupuestos, asciende a 396 millones de euros, un 11,4% superior a la última previsión de cierre del fondo de 2011 (355,7 millones). La cuantía definitiva de este último se conocerá en febrero.
El problema es que las últimas previsiones han resultado absolutamente erróneas, dada la agudización de la crisis en el último trimestre de 2011, que ha destrozado los cálculos de todas las administraciones en solo tres meses. Diversos alcaldes consultados dan por seguro que si Gobierno Vasco y diputaciones fallaron en el cálculo de lo que iba a pasar a finales del año pasado, sus estimaciones también andarán alejadas de la realidad en 2012, por lo que el cálculo del Fofin de este año se da por «obsoleto» y «desfasado». Máxime cuando esas previsiones auguraban una recuperación de la economía y un repunte de los ingresos este año que ahora no se atisba. Más bien todo lo contrario. Los expertos advierten que 2012 será peor que 2011.
Los alcaldes coinciden en preguntarse si «alguien cree realista que en la situación económica actual y con las perspectivas que existen, el Fofin de este año podrá ser un 11,4% superior al de 2011».
La preocupación entre los responsables municipales es total y la desconfianza, plena. Y no entiende de colores políticos. El alcalde de San Sebastián, Juan Karlos Izagirre (Bildu), admitió el miércoles que su equipo de gobierno deberá «reajustar» el proyecto de Presupuestos que iba a presentar en breve. Su homólogo en Irun, José Antonio Santano (PSE), anunció ayer que pospone la aprobación del presupuesto hasta febrero, cuando conozca el Fofin real de 2011 y las previsiones actualizadas de la Diputación para 2012. El primer edil de Elgoibar, Alfredo Etxeberria (PNV), denuncia la falta de información actualizada por parte de la Diputación en este escenario y lamenta que las corporaciones municipales han tenido que elaborar «a ciegas» sus presupuestos para este año.
Y es que los números no dan. Las haciendas vascas cerraron el año pasado con unos ingresos por impuestos de 11.480 millones de euros. Un 1,9% menos que en 2010 pero -y aquí está el problema-, un 8,1% menos que lo previsto a comienzos de año y un 1,8% menos que la previsión de octubre. En cifras absolutas, se recaudaron 1.020 millones menos que lo previsto a comienzos de año y 210 millones menos que lo que se daba por sentado en octubre. En Gipuzkoa, ese desvío ha sido de 344 (-8,7%) y 92 (-2,5%) millones respectivamente.
Además del problema que se vislumbra para 2012, los ayuntamientos tienen el añadido de que deben devolver a la Diputacióna cerca de 52 millones por el error de cálculo en 2011, que se suma a los 99 millones que están devolviendo en tres plazos por la desviación que también se produjo en 2009.
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