Noticia pubicada en Diario Vasco,el viernes día 12 de Agosto de 2022.
«Ahora me toca abrir mi propio camino cambiando de nombre a la heladería»
El chef heladero Yon Gallardo escribe un nuevo capítulo en la historia de su empresa familiar llamada hasta ahora 'Papperino'
Una de las heladerías artesanales más populares de Irun ha sido desde hace muchos años 'Papperino'. Situada en los jardines de Luis Mariano (paseo de Colón , 27), este establecimiento tan querido por los iruneses recientemente ha cambiado su nombre para adoptar el de su actual propietario, Yon Gallardo.
La heladería fue fundada el 21 de junio del año 1994 por los padres de Gallardo. Esta idea vino impulsada por otro establecimiento que tenían de antes en Hondarribia, el 'Aquarium'. «En esa época en Hondarribia no se trabajaba todos los meses en los que se trabaja ahora», comenta Gallardo, ya que la temporada de helados solo cubría desde la mitad de julio hasta la mitad de septiembre. Por esa razón, sus padres decidieron trasladarse a Irun, donde la temporada era más larga y más estable porque no dependía tanto del turismo.
«El nombre 'Papperino'», cuenta Gallardo, «viene de un cómic que le solía regalar mi abuelo italiano a mi madre. Era del pato donald». El pato Donald en Italia se llama 'Paperino' y es también una forma cariñosa de llamarles que usaba su abuelo. «Es una palabra que siempre hemos escuchado en casa y nos hizo gracia ponerle ese nombre a la heladería».
De 'Papperino' a 'Yon Gallardo'
Sin embargo, al igual que de 'Aquarium' pasó a 'Papperino', Gallardo se ha visto obligado a cambiarle ahora el nombre a su heladería. «Nos hemos encontrado con una empresa que está usando nuestro nombre», afirma. No es una simple casualidad, ya que la falta ortográfica de geminar la segunda 'p' que hizo queriendo la familia de Gallardo, también se repite en el nombre de la otra empresa.
El otro 'Papperino' lo abrieron al principio en Donostia y la distancia hizo que la convivencia fuera más fácil, pero ahora, han abierto otro local en Hondarribia y la confusión que genera en los clientes se ha vuelto «demasiado. Andan distribuyendo por Donostia y por Irun a restaurantes no sé si haciendose pasar por nosotros o, al menos, aprovechándose de la confusión», comenta Gallardo. De modo que, como legalmente la trayectoria del juicio sería larga y costosa, ha decidido invertir recursos y ponerle su propio nombre a la heladería. «Ahora me toca a mí abrir mi propio camino cambiándole el nombre a Yon Gallardo», declara el chef heladero.
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