El Alarde público de Irun volvió a recorrer las calles de la ciudad para demostrar otro año más, después del hiato pandémico, que también se puede disfrutar de tradiciones centenarias en igualdad. El desfile que permite que las mujeres desfilen como soldados realizó su propia Arrancada a las 10.20 horas desde la parte baja de la calle San Marcial, también con algo de lluvia leve, pero con una actitud de euforia que hizo que el mal tiempo fuese algo secundario.

La cantinera de Lapitze, junto a miembros de su compañía.

La cantinera de Lapitze, junto a miembros de su compañía.

La tropa paritaria realizó de manera ágil la subida a la plaza San Juan, donde, tras formar filas, aguardaron la llegada de su general, Maite Vergara, que se hizo esperar unos minutos.

La ausencia del primer edil, José Antonio Santano, en la balconada fue motivo de polémica.

La ausencia del primer edil, José Antonio Santano, en la balconada fue motivo de polémica.

Durante este rato, los soldados repararon en la ausencia, un año más, del alcalde de Irun, José Antonio Santano, entre mandatarios públicos que observaban el desfile desde la balconada de la casa consistorial. Entre clamas de “Emakumeak Alardean”, los soldados del Alarde público realizaron en ese momento una sentada en señal de protesta ante la ausencia del primer edil.

Sobre las 11.00 horas, Vergara atravesó la plaza a galope y, tras saludar a las compañías y a los mandatarios públicos, mando llamar a los capitanes de las unidades para darles instrucciones. “Ha pasado de todo, pero al fin estamos aquí y vamos a hacer Alarde con ganas y alegría”, comandó la general, para lanzar seguidamente las arengas “Gora Irun! Gora San Martzial!”. Jon Guezala

La compañía Bidasoa se acercó posteriormente a los arkupes de la casa consistorial, donde recibió la bandera de la ciudad de manos, por primera vez, de la delegada de Igualdad del Ayuntamiento de Irun, Miren Echeveste.

Además de representantes municipales de todos los grupos excepto del PP, también acudieron a apoyar al desfile paritario desde el balcón del Consistorio el delegado del Gobierno central en Euskadi, Denis Itxaso; la directora de Emakunde, Izaskun Landaida, y su secretaría general, Zuriñe Elordi; las adjuntas al Ararteko, Inés Ibañez de Maeztu y Julia Hernández, así como su responsable de Igualdad, Maria Luisa Agirretxe; la parlamentaria de EH Bildu, Oihana Etxebarrieta, y el portavoz del partido en las Juntas de Gipuzkoa, Karlos Izaguirre, así como Arantza González, de Ezker Anitza-IU y Elkarrekin.

Tras la salida del Alarde público hacia la parroquia del Juncal, Echeveste atendió a los medios y lamentó “no haber contado con la presencia de José Antonio Santano, ya que este año el alcalde tenía una gran oportunidad para dar un paso adelante”, a pesar de que el grupo municipal socialista estuvo representado por el delegado Borja Olazabal.

Por su parte, Itxaso defendió en declaraciones la compatibilidad entre la igual participación de hombres y mujeres en el desfile y la convivencia festiva. En cuanto a la ausencia de Santano en el recibimiento al Alarde Público, el delegado del Gobierno manifestó su “absoluto respeto” a la postura del alcalde y afirmó tener constancia de que el primer edil “trata de encontrar ese equilibrio” entre igualdad y convivencia en fiestas.

Desde EH Bildu, Izaguirre denunció el hecho de que este año se haya separado el acto del voto en San Marcial, en el que ambos Alardes han participado juntos en los últimos años, discriminando al desfile público.

Tras realizar las descargas de infantería en el Juncal y romper filas en la calle Santa Elena, el Alarde público cumplió el voto en la ermita de San Marcial y reanudó su marcha por la tarde a las 17.00 horas para realizar su recorrido vespertino.