Noticia emitida y publciada en Radio Irun-Cadena SER, el jueves día 22 de Abril de 2021.
Las políticas insuficientes de acogida abren paso a la muerte de personas migrantes
El Gobierno vasco anuncio el miércoles 21 la desactivación del plan de contingencia para personas migrantes
Grupo de migrantes en Irun / Cadena Ser
El pasado domingo 18 de abril, alrededor de las 8:30 de la mañana, una mujer encuentra el cadáver de un hombre negro ahorcado en la parte trasera del polideportivo Azken portu de Irun. Se encarga de la investigación la comisaría de la Ertzaintza de Irun.
En los días siguientes y a través de fuente contrastadas, Irungo Harrera Sarea consigue saber que: es un ciudadano eritreo sin documento de residencia de 21 años que no está empadronado en Irun y que no tienen ningún recorrido por la EPA de la localidad (que nos hablaría de algún tipo de arraigo). Además, no hay registro de que haya pasado por ningún recurso de acogida municipal ni otro. La comunidad eritrea de Irun no lo conoce. Es decir, estamos ante un fantasma. Con nombre, apellido y familia en Eritrea, según la investigación de la Ertzaintza.
Irungo Harrera Sarea trabaja con la hipótesis de que este fantasma es por su origen, su edad aproximada y su falta de arraigo en la zona, muy probablemente un migrante en tránsito. Además, la experiencia de la asociación lleva a plantear la hipótesis de que se trataba de un joven que probablemente entró en Europa por Italia, dado su país de origen. Que muy probablemente trató de llegar a Francia o Alemania, que no pudo asentarse en ningún lugar y deambuló por Europa, como otras tantos migrantes. Que en un momento dado llegaría a Irun para pasar a Francia. Incluso que podría haberlo conseguido, siendo detenido por Francia y expulsado ilegalmente, una o varias veces. Y que finalmente, ante la desesperación, optó por acabar con semejante hostigamiento. Hostigamiento a que son sometidas las personas migrantes desde el mismo momento que comienzan viaje y en todas las etapas que transitan. Hostigamiento que a menudo acaba en muerte.
La asociación que ayuda a la acogida de migrantes en Irun pone nombre a quienes según ellos inducen a morir a estas personas. “Países que funcionan como gendarmes de la UE: Marruecos, Turquía, Libia, etc. Fronteras externas de la UE: Grecia, Italia, Estado español y fronteras internas de espacio Schengen: Francia. También, acusa al Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones y en nuestro entorno más inmediato, Gobierno Vasco, Diputación de Gipuzkoa, Ayuntamiento de Irun.
“Sobre las administraciones vascas que nos hacen ver que quieren acoger y paliar estas políticas deshumanizadoras y racistas afirmamos que están jugando un muy insuficiente papel. En la práctica, estas administraciones se ocupan y preocupan en definir a migrantes en tránsito de una manera restrictiva y desfavorecedora para ellas. Consecuencia de ello, este pasado mes de marzo Irungo Harrera Sarea ha registrado más de 30 pernoctaciones en calle y sin acceso a ningún recurso. En abril, superaremos esas 30 estancias en calle. De nuevo, con dispositivos habilitados y sin ocupación completa” afirma Yon Aranguren portavoz de la asociación de Irungo Harrera Sarea.
Desde la asociación exigen al Gobierno Vasco, Diputaciones y al ayuntamiento (instituciones que forman la mesa interinstitucional para la acogida en Euskadi) que esclarezcan lo ocurrido con la persona muerta y faciliten su identificación, comunicación con la familia y la repatriación del cuerpo. También, piden que Diputaciones y ayuntamientos (Irun a la cabeza), que se pongan a trabajar a favor de los derechos humanos y las personas. Que hagan política en las instancias pertinentes para que se revisen y amplíen los criterios restrictivos, discriminatorios e insuficientes de acogida que afectan a las personas migrantes que llegan a Irun. Exigen al Gobierno Vasco, Diputaciones y ayuntamiento que dejen de esconderse tras su limitación de competencias y hagan política para que se abra la frontera racista de Hendaia.
La entidad prevé que si esta situación continúa temen encontrar más cadáveres en el Bidasoa o en sus riberas. Por ello, reclaman a las administraciones que dejen de normalizar el racismo, la discriminación y la posibilidad de muerte como algo natural a las migraciones
Irungo Harrera Sarea llama a concentrarse el jueves a las 18h en la Plaza San Juan. “No vamos a normalizar ni aceptar la muerte de personas inocentes, somos una tierra de acogida y de vida”.
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