Noticia publicada en Conecta Bidasoa, el martes día 15 de Junio de 2021.

Declaración con motivo del Día Mundial de Toma de Conciencia del Abuso y Maltrato en la vejez

Con motivo del Día Mundial de Toma de Conciencia del Abuso y Maltrato en la vejez que se conmemora este martes, 15 de junio, todos los grupos municipales del Ayuntamiento de Irun se suman a la declaración promovida por CONFEMAC (Confederación Estatal de mayores activos), y suscrita por el Ministerio de Derechos Sociales y Agenda 2030

Por Conecta Bidasoa -

15 junio, 2021

Páez (i), Melida, Santano, Manrique, Iridoy y Echeveste, en la Sala Capitular del Ayuntamiento de Irun.

Con motivo del Día Mundial de Toma de Conciencia del Abuso y Maltrato en la vejez que se conmemora este martes, 15 de junio, todos los grupos municipales del Ayuntamiento de Irun se suman a la declaración promovida por CONFEMAC (Confederación Estatal de mayores activos), y suscrita por el Ministerio de Derechos Sociales y Agenda 2030.

El texto de la declaración institucional es el siguiente:

«El maltrato a las personas mayores es una violación de los Derechos Humanos y está declarado por la OMS como un problema de salud por sus terribles consecuencias. Hace falta formación e investigación para evitarlo.

Es necesario abrir los ojos y actuar ante situaciones y formas de trato, -económico, psicológico, afectivo-sexual, etc.- consideradas como normales, pero que son maltrato.

Ante el maltrato, hay recursos legales e institucionales a los que acudir. Eliminar el abuso y maltrato depende en gran medida de las personas que cuidan pero también del compromiso proactivo de instituciones, profesionales y medios de comunicación.

Las mujeres mayores, dependientes, que viven solas y con pocos recursos, tienen mayor riesgo de ser objeto de maltrato. Es necesario concienciar a las propias personas mayores sobre su derecho a un trato digno y para que mantengan las riendas de su vida, frente al riesgo de que otros decidan por ellas.

Las instituciones públicas deben comprometerse con planes específicos económicamente dotados, que incluyan protocolos de prevención, detección e intervención.

La meta es el buen trato, a las personas mayores, como compromiso común de toda la sociedad. Tratar con la dignidad y el respeto al que todos tenemos derecho. Tratar como nos gustaría ser tratados».