El Consejo de Administración de IRUNVI ha dado luz verde a los pliegos para la contratación de las obras de urbanización del ámbito de San Miguel Anaka, una actuación estratégica que marcará un antes y un después en el desarrollo urbano de la ciudad. La inversión prevista, que supera los 30 millones de euros, permitirá poner en marcha la mayor operación de vivienda protegida realizada hasta la fecha en el municipio.
El arranque de las obras se producirá en la calle San Sebastián, en el barrio de San Miguel, dando inicio a la transformación de una amplia zona que hasta ahora permanecía degradada. En total, se prevé la construcción de 1.175 viviendas, de las cuales alrededor de 887 serán de protección oficial (VPO). El proyecto incluye además nuevos equipamientos públicos, piscinas, zonas deportivas, zonas verdes, aparcamiento y espacios para la convivencia vecinal.
Un barrio para vivir y conectar
La nueva urbanización no solo supondrá un gran impulso en materia de vivienda, sino también una reordenación completa del espacio urbano, con especial atención a la conexión entre los barrios de San Miguel y Anaka. El proyecto contempla la creación de plazas, vías ciclistas, paseos peatonales y un corredor verde que facilitará los desplazamientos a pie o en bicicleta, además de nuevos accesos para el transporte público.
Este desarrollo generará una nueva centralidad urbana, fortaleciendo la cohesión social e impulsando la economía local con la llegada de cerca de 1.000 nuevas familias. San Miguel Anaka dejará de ser un área periférica para convertirse en una zona integrada dentro del continuo urbano del norte de la ciudad.
Calendario acelerado y condiciones sociales
En un principio, el proyecto preveía una ejecución por fases en un plazo de 72 meses, pero el pliego aprobado ahora exige que las fases se ejecuten de forma simultánea, reduciendo el plazo a 48 meses. Esta decisión responde a la voluntad del Ayuntamiento y del Gobierno Vasco de iniciar cuanto antes las obras de edificación de las VPO.
El pliego también contempla condiciones específicas para reducir al mínimo el impacto en el entorno: las obras que afecten al colegio de la zona deberán realizarse en verano, se garantizará un aparcamiento provisional, y se habilitará un paso alternativo entre San Miguel y Anaka mientras duren los trabajos.
Vivienda para todos los perfiles
El plan incluye 147 VPO en régimen de compra, cuyo suelo ya ha sido enajenado por IRUNVI, así como otras 447 viviendas en régimen de alquiler social, actualmente en tramitación por el Gobierno Vasco. También están previstas promociones de vivienda libre, cuyos anteproyectos han sido informados favorablemente por el Ayuntamiento.
La actuación contempla además la reurbanización de zonas próximas como la calle Jaizkibel y parte de la Avenida Letxunborro, donde se desplazará la mediana, se ampliará el paseo peatonal y se construirá un nuevo carril bici de doble sentido.
El nuevo barrio contará con un anillo perimetral formado por las calles San Sebastián, Anaka, Jaizkibel y la Avenida Letxunborro, y se completará con la prolongación de Luis de Uranzu, que conectará con la rotonda de Gibeanaka. La calle San Sebastián se transformará en una avenida arbolada, con múltiples usos del espacio público pensados para el bienestar vecinal.
Con el inicio de las obras de urbanización, el municipio pone en marcha un proyecto ambicioso y necesario, que conjuga planificación, sostenibilidad y compromiso social para dar respuesta a la creciente demanda de vivienda y mejorar la calidad de vida en toda la zona oeste de la ciudad.