Noticia publicada en Conecta Bidasoa,el miércoles día 16 de Marzo de 2022
San Miguel-Anaka, más equipamientos públicos e impulso a la vivienda pública
Con el desarrollo futuro del ámbito, Irun contará con una zona de piscinas cubiertas y un nuevo campo de fútbol
El alcalde de Irun, José Antonio Santano, y el delegado de Urbanismo, Miguel Ángel Páez, han informado esta mañana de las novedades en el desarrollo del ámbito de San Miguel-Anaka. Para ello han presentado las primeras imágenes que dibujan el futuro de todo este entorno, en el que destacan los nuevos equipamientos de piscinas cubiertas y un campo de fútbol nuevo, además de un importante impulso a la vivienda pública en Irun que alumbrarán un nuevo barrio.
«De momento poco a poco y sin pausa, pero vamos viendo ya movimientos importantes en San Miguel Anaka. Desde la reapertura de los pasos peatonales el año pasado, la zona afronta un nuevo horizonte, cada vez más cerca del desarrollo para todo este ámbito que va a ofrecer oportunidades muy interesantes para el barrio y el resto de la ciudad con un importante bloque reservado a la vivienda pública. Contamos además con el proyecto de urbanización aprobado, paso fundamental que dibujará los usos futuros de esta actuación», valoraba el primer edil.
Entre los muchos pasos dados en este ámbito, el alcalde recordaba las ayudas para rehabilitar los edificios que se consolidan. De hecho cabe señalar que uno de los objetivos principales de la propuesta de modificación de la actual ordenación es la consolidación de la mayor parte de los edificios residenciales.
En función de los nuevos criterios de ordenación, el Ayuntamiento de Irun aprobó la concesión de subvenciones para los edificios residenciales que se consolidaban, atendiendo a la situación urbanística que han sufrido los mismos a lo largo de los últimos años y que han provocado que los propietarios de las mismas no hayan podido acometer obras de reforma o actualización de sus viviendas. A lo largo de 2014 y 2015, se han ido concediendo estas ayudas a los edificios que así lo han solicitado. La última novedad hasta la fecha en el ámbito se producía la semana pasada, cuando la Junta Local de Gobierno aprobaba la concesión a Irunvi de la licencia de derribo del Caserío Santa Bárbara en C/ San Sebastian nº25, el último edificio pendiente de derribo entre los inmuebles que quedaron fuera de ordenación, a excepción de Sancheski.
Asimismo, tras la luz verde del Gobierno Vasco a la Declaración de Suelo, el proyecto de urbanización que ha venido redactándose estos meses se ha aprobado de forma definitiva este mes de marzo. Una vez se haga lo propio con el proyecto de reparcelación, en fase de tramitación, se espera que a lo largo de 2022 salgan a la licitación las obras.
Está previsto que la tramitación proyecto de reparcelación se lleve a cabo este año y que en 2022 se inicie la licitación de las obras de urbanización (presupuesto estimado de 20.675.195,32 euros más IVA), estando previsto el inicio de la ejecución de las mismas para principios del año que viene. IRUNVI es el encargado de llevar a cabo el desarrollo y ejecución del ámbito la actuación en virtud del encargo de gestión aprobado por el Ayuntamiento en el año 2010.
Las obras de urbanización comenzarán por la calle San Sebastián y seguirán por toda una zona donde está prevista la edificación de 1.175 viviendas aproximadamente de las cuales en torno a 887 serán de VPO, y equipamientos públicos para el barrio como piscinas públicas y otros espacios deportivos. La superficie total del ámbito es de 137.000 m2. Desde IRUNVI destacan que tras la solicitud realizada por parte del Ayuntamiento al Gobierno Vasco, las 447 VPO que le corresponden y que serán las primeras que se edifiquen, se ejecutarán en régimen de alquiler.
Un nuevo barrio
Los datos más relevantes de San Miguel Anaka, en relación con la propuesta de urbanización, tienen que ver con el tamaño de la nueva zona residencial y con la escala e incidencia de ese nuevo el tejido urbano.
Se creará un nuevo barrio que, al integrar la trama urbana irregular de sus bordes unirá los barrios de Anaka y San Miguel, transformando la parte norte de la ciudad de Irun, y la convertirá en otro modelo de ciudad, más conectada y sostenible.
La superficie que abarca este proyecto es de 138.074 m2 y se ocupa de la definición de obras en los suelos públicos (sin equipamientos, ni derribos, ni descontaminación), excluye de la urbanización el Parque Julián Sánchez (6.128 m2s urbanizados hace unos años) y los patios interiores de manzana cuya ejecución se definirá en el marco de los proyectos de obras de construcción de las manzanas.
Se urbanizan espacios públicos fuera del ámbito en el entorno de la calle Jaizkibel y parte de la Avenida Letxunborro desplazando la mediana al norte y re-trazando el carril-bici con una sección más apropiada al doble sentido, colindante a la actuación y acompañada de un corredor verde. Se amplía además el paseo peatonal. En la práctica, se crea un anillo perimetral (calles San Sebastián, Anaka, Jaizkibel y la Avda Letxunborro), al que se añade la prolongación de Luis de Uranzu, que cruzará San Miguel Anaka conectando con la rotonda de Gibeanaka. En ellos se apoya el tráfico rodado, aparcamiento, el transporte público, equipamientos, etc. La calle San Sebastián se convertirá en una amplia avenida con zonas verdes en el que se apoyan diferentes usos del espacio público. Tendrá una única dirección, con dos carriles en dirección a calle Anaka.
Cabe señalar que se divide la obra urbanizadora en 5 fases; su ejecución podrá llevarse a cabo de manera independiente. La estructura del documento permite su división para que dichas obras sean licitadas tanto de manera individualizada, como agrupada.
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