La Corporación municipal celebró el pasado viernes su Pleno ordinario correspondiente al mes de marzo, con 13 puntos en el Orden del Día, entre las que destacan dos mociones en torno a la situación de la sanidad en la ciudad.

La primera de ellas la presentó el grupo municipal EAJ-PNV, para solicitar al Gobierno Vasco un convenio de colaboración entre Osakidetza y el Ayuntamiento, en el que se definan los plazos, compromisos y la financiación para la construcción de un ambulatorio de grandes dimensiones en el centro, en el ámbito de Vía Irun, además de otro de menor tamaño en Oñaurre, así como para la mejora de los servicios asistenciales.

Su portavoz, Xabier Iridoy, explicó que ante la presentación de la hoja de ruta que recoge el Plan Director para la OSI Bidasoa y “dada la situación que vive nuestra ciudad” su grupo considera “necesario” que el Ayuntamiento y el Departamento de Salud del Gobierno Vasco “estrechen la colaboración y trabajen persiguiendo el mismo fin, que es mejorar la situación de la sanidad”. Solamente los jeltzales votaron a favor de la moción, mientras que el resto de integrantes de la Corporación lo hizo en contra, por lo que la propuesta no fue aprobada.

También la Federación de Asociaciones de Vecinos de Irun llevó al Pleno una moción, en este caso para solicitar a los grupos políticos municipales que “muestren de una forma clara e inequívoca su apuesta por construir cuanto antes un tercer ambulatorio en Oñaurre y así se lo trasladen a la Consejería de Sanidad, para que presente con urgencia un calendario creíble que permita disponer de esta infraestructura básica en no más de tres años”. La entidad solicita asimismo “demandar a Osakidetza que muestre su predisposición a negociar con el Ayuntamiento, la plataforma Osasun Bidasoa y la propia federación un programa marco de actuaciones a futuro, que fije las necesidades de atención primaria de Irun para los próximos años, en el que se contemplen todos los equipamientos que serán necesarios. Su representante, Francisco Martínez, aseguró que la moción recoge “clara y fielmente lo que quieren los vecinos de Irun”.

Tras las intervenciones de los portavoces de todos los grupos políticos, así como la del alcalde, la moción fue aprobada por mayoría, con la única abstención de EAJ-PNV.

Por otro lado, y entre otras cuestiones, en el Pleno del viernes se aprobó por unanimidad una declaración institucional a favor de la Agenda 2030 de los ODS. l