20 años de alianza transfronteriza
El Consejo General del Consorcio Bidasoa-Txingudi ha aprobado por unanimidad renovar el convenio firmado en 1998 y refrendado en 2008
El 23 de diciembre se cumplirán 20 años del paso pionero que Irun, Hondarribia y Hendaia dieron al constituir el Consorcio Transfronterizo Bidasoa-Txingudi. Por primera vez en Europa, tres municipios de dos países conformaban una alianza con base jurídica. Obviamente, no fue un camino fácil.
Los alcaldes de entonces, Alberto Buen en Irun, Borja Jauregi en Hondarribia y Raphael Lassallette en Hendaia, suscribieron un convenio para diez años en un barco anclado en mitad de la bahía que baña los tres municipios. Desarrollar una oferta turística conjunta; organizar actividades culturales, festivas y deportivas y promocionar las relaciones entre empresas de las tres localidades eran algunos de los objetivos clave.
Diez años después, en 2008, en un contexto muy diferente, los tres municipios renovaron sus votos. Europa había crecido y se había afianzado, habían surgido proyectos de colaboración transfronteriza de mayor escala como la Eurociudad Bayona-San Sebastian o la Eurorregión Euskadi-Aquitania (hoy, Nueva Aquitania-Euskadi-Navarra) y los retos de la eurocomarca, necesariamente, tenían que cambiar. Se establecieron como prioridad las acciones para avanzar hacia un transporte público compartido durante todo el año, recogiendo también otras ideas como el cuidado mediambiental del río o incorporar otros municipios del entorno al trabajo transfronterizo.
La renovación marcó también un plazo de vigencia de 10 años y esta semana, el Consejo General del Consorcio, con la unanimidad de todos sus miembros, aprobó reeditarlo. Igor Enparan, edil hondarribitarra de Abotsanitz, sugirió la conveniencia de una reflexión para determinar qué retos debe afrontar ahora el Consorcio. Los alcaldes, José Antonio Santano (Irun), Txomin Sagarzazu (Hondarribia) y Kotte Ecenarro (Hendaia) recibieron la propuesta con interés y aprovecharon para reivindicar lo realizado en estas dos décadas
Avances reales
Abrir camino nunca es fácil y en un asunto tan complicado como la colaboración transfronteriza, el Consorcio Bidasoa-Txingudi no dejó de encontrar obstáculos. Varios se superaron despejando el sendero para quienes vinieran detrás y otros se esquivaron como buenamente se pudo para poder seguir avanzando. Por supuesto, hubo también algunos que no hubo manera de vencer.
En estos 20 años, las relaciones entre administraciones de ambos lados se han transformado por completo y el Consorcio tiene mucha culpa, pero socialmente ha costado percibir su utilidad. Lo cierto es que los objetivos se han ido cumpliendo, aunque en ocasiones los logros no se los apuntara el propio Consorcio, que si bien era el escenario donde se fraguaban los acuerdos, éstos se firmaban después en la mesa de las instituciones que tenían la competencia necesaria para cada caso.
No hay comentarios:
Publicar un comentario