PRIMEROS PASOS PARA LA ERRADICACION DE LAS BALSAS DE PURINES DE OLABERRIA
Se ha aprobado la consignación presupuestaria que permitirá realizar un estudio y poner en marcha la redacción de un proyecto para su eliminación.
Las balsas de purines del antiguo Matadero Montero, serán objeto de un estudio de investigación y análisis que concluya en la redacción de un proyecto para su erradicación. Para ello el Ayuntamiento de Irun ha puesto en marcha un proceso de licitación con un presupuesto de 18.000 euros y seis meses de plazo para su ejecución.
Las balsas de purines del antiguo Matadero Montero, serán objeto de un estudio de investigación y análisis que concluya en la redacción de un proyecto para su erradicación. Para ello el Ayuntamiento de Irun ha puesto en marcha un proceso de licitación con un presupuesto de 18.000 euros y seis meses de plazo para su ejecución.
“Es sin duda una buena noticia ya que se pone en marcha el camino para la recuperación de este espacio que ha pasado por ser objeto de diferentes proyectos y del que al final queremos recuperar cuanto antes su gran valor medioambiental”, explicaba Miguel Ángel Páez delegado de Medio Ambiente en el Ayuntamiento de Irun
Estas balsas de depuración de orines se ubican en el barrio de Olaberria de Irun, datan de entre 1981 y 1984, y ocupan una parcela de 25.328 m2, propiedad actualmente del Ayuntamiento de Irun y colindante con la carretera provincial GI-3452 (Olaberria-Ventas), desde la que tienen acceso directo.
Se trata de cuatro balsas de diferentes tamaños y formas, situadas escalonadamente en la ladera y, presumiblemente, intercomunicadas entre sí (al menos las tres más bajas). Balsas que, desde el momento de su construcción, han sido utilizadas de diversa manera y que, en la actualidad, están en total desuso.
Páez detallaba que “Su ubicación en suelo no urbanizable así como su actual estado físico plantean la conveniencia de acometer las actuaciones necesarias para su desmantelamiento y erradicación con la consiguiente recuperación física y ambiental del espacio ocupado por las mismas.”
Sin embargo, tales actuaciones requieren un análisis previo del terreno ocupado que posibilite el planteamiento de aquellas soluciones adecuadas para conseguir tal fin. De lo que se trata es de obtener un documento que detalle la solución y poder pasar posteriormente a adjudicar el sellado final y la recuperación física y ambiental del espacio actualmente ocupado por las antiguas balsas
Se estima que los trabajos podrían tener un plazo de ejecución de 6 meses y que sentarían las bases de los trabajos a realizar para la recuperación definitiva de este entorno.
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