Markel Olano y Aintzane Oiarbide. / Diputación Foral de Gipuzkoa
La Diputación Foral de Gipuzkoa ha anunciado que la entidad foral está avanzando en la creación del nuevo acceso viario a Irun al habilitar los aproximadamente 15 millones de euros necesarios para la financiación del proyecto de semienlace y Ronda Sur que, tras su construcción, mejorará notablemente la movilidad de los vecinos de Irun.
El diputado general, Markel Olano, ha querido constatar que “hemos dado un paso más, de esta forma, en la financiación de la Ronda Sur, cumpliendo así el compromiso con los irundarras. A partir de ahora, si el Ayuntamiento de Irun da los pasos pertinentes podría comenzar desde ya las obras de la Ronda Sur, en coordinación con Bidegi”. En este sentido, Olano ha añadido que se está redactando el convenio de financiación que “se remitirá en breve” al Ayuntamiento de Irun. La cifra definitiva se conocerá una vez se hayan adjudicado las obras de ambos proyectos, ya que ahora disponemos de las cifras aproximadas de la licitación y a falta de terminar los proyectos que concretan el coste total. Se estima que el montante de la financiación que la Diputación Foral de Gipuzkoa destinará a la Ronda Sur será de más de 6 millones y que, junto con lo asumido por Bidegi, las arcas guipuzcoanas harán una inversión de aproximadamente 14 millones de euros.
Por su parte, la diputada de Infraestructuras Viarias, Aintzane Oiarbide, ha querido subrayar que “en ningún momento” se ha cuestionado la financiación de la Ronda Sur por parte de la Diputación Foral de Gipuzkoa y más allá de polémicas estériles planteadas en los medios de comunicación por parte del Ayuntamiento de Irun, nuestro compromiso siempre ha sido y es claro. “La construcción del enlace mejora la accesibilidad del núcleo urbano de Irun, pero su verdadero potencial de servicio se manifiesta si se complementa con la construcción de la ronda sur, que en paralelo a la autopista, bordea el casco de Irun generando nuevos accesos a su trama urbana”, ha aclarado la diputada. Oiarbide también ha señalado que con esos accesos por el sur del casco urbano, se diversificarán las opciones y redundará en beneficio de la red foral de carreteras, y en especial de la GI-636, que actualmente se utiliza como vía única de conexión con el exterior.
Durante la comparecencia ante la prensa, la diputada Aintzane Oiarbide ha recordado que el proyecto de la Ronda Sur surgió tras la renuncia desde el Ayuntamiento de Irun y desde la Diputación Foral de Gipuzkoa al desdoblamiento de la antigua N-1, debido a las complicaciones que ello ocasionaría dentro del entramado urbano. “Tras la información pública del proyecto de trazado del desdoblamiento de la GI-636, y en vista de los problemas ambientales y funcionales detectados, así como la contestación social surgida, se optó por la alternativa de la Ronda Sur”.
“Es hora de trabajar conjuntamente en favor de la ciudadanía de Irun. Los irundarras llevan muchos años sufriendo retenciones y dificultades a la hora de acceder y salir de la ciudad. El nuevo semienlace y la Ronda Sur posibilitarán una conexión más directa con el centro de la ciudad y permitirá una notable mejora en la movilidad de los ciudadanos”, ha concluido el diputado general, Markel Olano.
Antes de que finalice el año, la sociedad foral Bidegi comenzará a ejecutar las obras que darán a Irun un nuevo acceso desde la AP-8 y que facilitará las entradas y salidas de la zona sur de la ciudad (Belaskoenea-Bentak) desde y hacia Donostia. El semienlace estará a la altura del punto kilométrico 4,300 de la autopista, en Lapice, entre Behobia y el peaje de Irun-Barrera.
La nueva conexión partirá desde la actual rotonda de Oinaurre, a pocos metros de la avda. Elizatxo, uno de los ejes principales de entrada a la ciudad y en la que confluyen las calles Arrabatenea y Jostun. Se construirá un vial de 166 metros de longitud que desembocará en una nueva rotonda de 50 metros de diámetro exterior. De la rotonda saldrá el vial de acceso que en forma de pendiente conectará con la autopista en sentido Donostia. Asimismo en esta rotonda confluirá el vial de salida de la autopista y el vial de conexión con la Ronda Sur.
El presupuesto estimado de la obra es de 8 millones de euros y se prevé que los trabajos comiencen para finales de año y tengan un plazo de ejecución de 12 meses.