Las dos ediles del PNV dimiten como delegadas de gobierno en Irun, lo que da por finiquitado el pacto entre jeltzales y socialistas
Esta mañana, el acalde Santano ha anunciado que si se producían estas renuncias, daría por roto el acuerdo
Lourdes Larraza y Josune Gomez, ambas concejalas de EAJ-PNV en Irun, han firmado su dimisión como responsables, respectivamente, de las áreas de Policía Local y Recursos Humanos y de Euskera, Juventud y Educación. Con estas renuncias, suscritas por las ediles en el consistorio a las 14.00 horas, atendiendo a las manifestaciones que había realizado el alcalde, José Antonio Santano, el pacto entre socialistas y jeltzales en el gobierno de la ciudad queda definitivamente roto. "Hemos presentado nuestra renuncia como acto de coherencia" después de que Santano cesara a Xabier Iridoy como delegado de Urbanismo. "Ha incumplido el Pacto de Gobierno y nos ha expulsado del Gobierno Municipal de Irun" ha afirmado Larraza. Gomez ha mostrado la voluntad de ambas de seguir trabajando con conocimiento adquirido, por y para Irun, desde una oposición constructiva.
De momento, el grupo que se queda en el gobierno municipal, Socialistas de Irun, no ha informado de cómo se reasignarán las tareas que hasta ahora gestionaban representantes del PNV, las ya mencionadas y Urbanismo y Vivienda que eran responsabilidad de Xabier Iridoy.
Santano ha comparecido antes, a primera hora, para dar cuenta de los acuerdos que ayer adoptó la Junta de Gobierno Local, en la que no participaron las dos concejalas de EAJ-PNV, "pero podían haberlo hecho" porque aún no habían presentado su dimisión. Es con esa renuncia con la que el alcalde da por roto ese acuerdo. "Han hecho un buen trabajo", ha valorado Santano, que ha asegurado no tener problema alguno "con ellas, con el pacto ni con el PNV; el único problema se ha producido en el ámbito urbanístico". Ha insistido en que su "pérdida de confianza" en el delegado se debe a "una mala gestión, a la falta de transparencia y al trabajo al margen de los informes técnicos y la legalidad urbanística. En cualquier sitio eso sería considerado muy grave. Aquí, hay gente que considera que es una crisis política, pero yo no lo llamo así. En Irun las cosas no funcionan así, se sea del PNV o del partido que se sea. Yo no he mirado eso. La forma de trabajar el urbanismo local para mí, es una seña de identidad. Que nadie pueda hacer insinuaciones porque falten luz y taquígrafos; en materia de urbanismo es peligroso. Esas críticas han venido de los grupos de la oposición. Ahora ya sé que a cada uno le toca decir lo que le toca, pero las han venido haciendo y eso afecta al crédito del Ayuntamiento de Irun".
Ha reconocido que Korrokoitz no ha sido el único problema. "Siempre hay una última gota que colma el vaso y considera uno la más grave. Pero es evidente que no ha sido el único problema. Asume que todo el mundo intenta hacer las cosas lo mejor posible, pero hay gente que las hace francamente mal y cuando eso ocurre, a un alcalde le toca poner orden. Primero hablando, pero si se persevera, se insiste y hay una huida hacia adelante y si queremos que la transparencia y la legalidad prevalezcan en nuestro urbanismo, hay que tomar decisiones. Creo que la decisión que he tomado es la que hubiera tomado también cualquier ciudadano de Irun con los datos que tengo yo en la mano".
Respecto a estas declaraciones, Lourdes Larraza ha advertido que no van "a permitir ni una insinuación, ni que se ponga en duda la gestión de Xabier Iridoy al frente de las delegaciones de Urbanismo y Vivienda y exigimos a Santano respeto a EAJ-PNV".
No hay comentarios:
Publicar un comentario