Trabajadoras de residencias y centros de día se concentran en la plaza del Ensanche
Han iniciado una nueva campaña de movilizaciones «por nuestras condiciones laborales y por un sistema de cuidados de calidad»
Trabajadoras de las residencias y centros de día de Gipuzkoa celebraron ayer en la plaza del Ensanche una concentración bajo el lema 'Cuidemos a quienes nos cuidan' y dieron lectura a un comunicado para «denunciar nuestra situación laboral y pedir soluciones».
El conflicto laboral que afecta a estas trabajadoras, que ayer cumplían 227 días de huelga, desde que se rompiera el diálogo en la mesa de negociación, puede alargarse aún más. El sindicato mayoritario ELA ha registrado un nuevo mes de huelga, que si no hay acuerdo previo, comenzará el 9 de marzo. Las trabajadoras han iniciado una nueva campaña para dar visibilidad a su situación por toda Gipuzkoa. «Llevamos 227 días en huelga para no sólo mejorar nuestras condiciones laborales, sino también por un sistema de cuidados de calidad», dijeron. «Hoy, en Irun venimos a decir que un tercio de nuestra plantilla no llega a los 1.000 euros. Para levantar, limpiar, vestir y poner el pañal a una persona, tenemos 15 minutos», añadieron. «En muchas residencias, hay dos enfermeras para atender a 140 usuarios. En comparación con los sectores donde mayoritariamente trabajan hombres, cobramos 6.000 euros menos. Nuestros abuelos y abuelas tienen una atención media de 90 minutos por día».
Las trabajadoras denunciaron que las empresas del sector «tienen cada vez más beneficios, gracias al sistema de privatización, mientras las trabajadoras somos cada vez más precarias. Su sostenibilidad se basa en nuestro ahogo y en la falta de bienestar de los usuarios y usuarias».
Asimismo, responsabilizaron del conflicto laboral a la Diputación de Gipuzkoa «ya que financia el 90% de las residencias» y criticaron las declaraciones del diputado general, Markel Olano, «que ha afirmado una y otra vez» que la institución foral «apuesta por las políticas de igualdad mirando a la economía, los cuidados y la violencia machista».
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