La rotonda de la GI-636 ha servido para agilizar la salida de la ciudad
La pasarela permite el tránsito seguro de peatones, bicicletas y caballos. La Diputación ha corrido con los gastos (tres millones de euros) de la rotonda y de la pasarela
- I.A. | HONDARRIBIA.
La rotonda del hospital lleva un tiempo funcionando y hace unos días se abrió la pasarela peatonal, que también pueden utilizar los ciclistas y los que van a caballo. Ayer tuvo lugar la visita institucional para explicar los detalles de estas dos obras, que han corrido a cargo de la Diputación Foral de Gipuzkoa.
Con un presupuesto de tres millones de euros (2.034.00 para la rotonda y 966.000 para la pasarela) y un plazo de ejecución de once meses, la Unión Temporal de Empresas formada por las empresas Zubieder y Mariezcurrena ha realizado los trabajos. Además de la glorieta de cuatro brazos, que elimina la peligrosa intersección en T para ir hacia el hospital comarcal, se ha eliminado el peligroso cruce donde se juntaban los vehículos que venían de Irun y de Hondarribia. En cuanto a la pasarela, tiene una anchura de cuatro metros útiles con rampas a cada lado (con pendientes del 6% en el lado sur y 8% en el norte%). También se puede acceder al paso a través de sendas escaleras.
Los alcaldes, agradecidos
Los alcaldes de Hondarribia e Irun acudieron a la presentación. Aitor Kerejeta subrayó que «la rotonda lleva un tiempo en marcha y que las consecuencias son muy notables para Hondarribia. Era un proyecto de hace muchos años, que ha ido cambiando con el tiempo, y estamos contentos porque esta obra era muy importante para Hondarribia, más para la salida que para la entrada».
Quiso el alcalde «agradecer a la Diputación que haya cumplido su palabra. A partir de ahora hay más trabajo por hacer, por un lado con un bidegorri que unirá Jaizubia y Amute, que podría estar hecho en 2-3 años. Y, en paralelo, la rotonda de Amute, que es muy necesaria porque pasan cada día más de 30.000 vehículos por ahí».
Su homólogo irundarra, José Antonio Santano, recordó que «llevábamos tiempo planteándole a la Diputación y de hecho lo negociamos juntos los dos alcaldes con la diputada hace casi tres años. Fruto de esa negociación se ha llevado a cabo esta actuación que es una parte de una mayor. Hay que reconocer que tal y como se ha hecho la intervención, ha resuelto, por lo menos, una parte de los problemas que había, que son de dos tipos. Por un lado de entrada y salida de la ciudad y entrada al hospital, y también la coincidencia de tráficos con Hondarribia, con ese ceda el paso que desaparece. Con la pasarela se ha resuelto otro problema importante y que muchos ciudadanos nos pedían, que es el paso peatonal. Se han construido prácticamente a la vez y también eso lo habíamos solicitado. Se ha respondido a lo que los ayuntamientos habíamos planteado».
«Un problema histórico»
Joseba Altube, director de Infraestructuras Viarias, recordó que «era un problema histórico, con una intersección muy peligrosa. Nos encontramos con un presupuesto de 48 millones de euros desde Gaintxurizketa hasta Irun. En estos tiempos de crisis no podíamos llevar adelante tal proyecto y empezamos a replantearlo. Hemos conseguido por lo menos hacer frente al problema más importante. Se doblan todos los movimientos y se mejora la accesibilidad tanto para peatones como para ciclistas. Los que vengan al hospital en autobús podrán utilizar esta pasarela».
Y por otro lado «teníamos una de las intersecciones peores de Gipuzkoa, cuando se juntaban dos carriles, los de GI-636 y N-638. Se han solucionado las retenciones de las horas punta. Estamos contentos y los usuarios también. La gente ha tenido paciencia, porque para hacer una rotonda como esta se han creado afecciones. Pero el tráfico alternativo y los desvíos funcionaron bien durante las obras». Anunció además que «en breve habrá un bidegorri desde esta zona hacia Amute».
También desde Diputación, la diputada de Movilidad e Infraestructuras Viarias, Larraitz Ugarte, señaló que «políticamente era una obra muy importante, ya que era una intersección con muchísimo tráfico y problemática. Había un proyecto para desdoblar, pero era de casi 50 millones de euros y en época de crisis se pueden encontrar soluciones más económicas, como ésta, que ha costado tres millones de euros».
Explicó que «esta es una infraestructura que arregla un problema importante y se soluciona en gran medida para vehículos, ciclistas y peatones. Los alcaldes de Irun y Hondarribia me han confirmado que los ciudadanos están contentos y también lo está la Diputación».
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