Juncal Eizaguirre (i), Cristina Aguirre y María José Noain. / Ayuntamiento de Irun
La delegada de Cultura, Juncal Eizaguirre; la directora del Museo Romano Oiasso, Cristina Aguirre; y la responsable de actividades, María José Noain, han dado cuenta de los datos de actividad más destacados que a lo largo de 2018 registró este equipamiento cultural de la ciudad.
“Buena parte de la agenda cultural de la ciudad pasa por el Museo Romano Oiasso, gracias a una intensa programación que incluye una interesante oferta de actividades paralelas, exposiciones temporales en colaboración con otros museos de alcance nacional y por supuesto, una colección de restos arqueológicos de primer orden que conservan nuestro pasado romano. Este último aspecto hace además de Oiasso un recurso fundamental en la carta de presentación de Irun como destino turístico”, destacaba Juncal Eizaguirre.
El buen momento que vive el Museo Romano Oiasso se sustenta en unas cifras de visitas que no han dejado de crecer desde su inauguración en 2006. Solo a lo largo del año anterior, pasaron por las instalaciones del museo 29.210 personas (un 1,4% más que en 2017), lo que deja el número de visitas desde su apertura rozando las 300.000 entradas. Desde Oiasso señalan que el incremento de público se reparte casi equitativamente entre los diferentes tipo de público: escolares, grupos y adultos. Asimismo se destaca el aumento de las visitas de turistas en verano y otros periodos vacacionales, influido en gran medida por la programación de salidas y excursiones, por ejemplo, a las minas de Irugurutzeta o la necrópolis de Santa Elena, o el despegue de “Atlantiaca” la Red de Ciudades Romanas, lo que acentúa el perfil turístico de Oiasso.
En palabras de Cristina Aguirre, “no cabe duda de que el Museo Romano Oiasso se ha consolidado como un museo de referencia en el sector. Combina un modelo de museo en el que, además de la divulgación de la arqueología, la historia y el patrimonio, abre sus puertas a la creación contemporánea, a la investigación y a la divulgación cultural en nuevos formatos”. Como ejemplo, Aguirre señalaba los talleres de arqueología didáctica como el “Arkeolab”, el programa “Arkeo&Art” de residencias artística, los cursos e arqueología e historia, la serie de viajes arqueológicos, el festival de recreación histórica Dies Oiassonis o el Festival de Cine Arqueológico del Bidasoa (FICAB), que se ha convertido en un referente y que a lo largo del año está presente en numerosas muestras españolas de cine documental arqueológico. De hecho en 2018, el certamen ha crecido exponencialmente en cuanto a número de espectadores, gracias a que el Festival se desplaza a diferentes localidades. En este capítulo se integra la serie de actuaciones musicales de pequeño formato que se programan en las instalaciones de Oiasso y aquellas propuestas de agenda cultural que se enmarcan en el programa “El Foro de Minerva”.
Este crecimiento de Oiasso ha venido muy determinado por su política de colaboraciones o ‘alianzas’ con otros museos de primer nivel a nivel nacional que han permitido acoger en Irun exposiciones de mucha calidad. Por ejemplo, este ha sido el caso de la colaboración con el Museo Nacional de Arte Romano de Mérida que permitió traer el verano pasado la magnífica exposición “Mulieres, mujeres en Emerita Augusta”. Además de contemplar piezas arqueológicas de gran nivel, la muestra ofreció un discurso en el que las mujeres eran protagonistas, incorporando el punto de vista del género. También fruto de otra colaboración, en este caso con el Arkeologi Museoa de Bilbao, fue la exposición “Los cambios climáticos a lo largo de la historia”.
La forma de acceder a los contenidos de Oiasso también es otra línea que se ha reforzado mucho en el museo. La apuesta en este sentido del año pasado ha sido la renovación de la página web, que ofrece un nuevo diseño más dinámico y accesible. Los usuarios de la web de Oiasso en el 2018 han prácticamente duplicado los del año 2017. Otro de los aspectos que quieren apuntar desde Oiasso es la respuesta positiva de quienes conocen el museo. El grado de satisfacción del público es muy alto; la nota de las visitas es de 4,2 puntos sobre 5; y esta puntuación alcanza el 5 en el caso de los escolares. “Esto es una nota muy alta, lo cual indica que vamos por el buen camino, pero también que tenemos que trabajar en dar a conocer la oferta a más colectivos y de esa manera atraer más visitantes”.
Más que un museo
A lo largo de estos años el museo y el área de Cultura del Ayuntamiento de Irun han consolidado una programación cultural estable y en cierta manera singular puesto que, además de la actividad ordinaria de cualquier museo (oferta de visitas comentadas tanto para visitantes individuales como colectivos, cursos, talleres, exposiciones temporales y conferencias), viene incorporando a su programación cinco actividades fundamentales de su oferta que hacen a Oiasso un museo único: FICAB, uno de los pocos festivales internacionales de cine arqueológico que existen en el país, y que en el 2018 ha celebrado su decimoctava edición; el Congreso sobre museología de carácter anual organizado en colaboración con la UPV; los Dies Oiassonis, festival de reconstrucción histórica que pretende divulgar el pasado romano de la ciudad combinando la visión didáctica y la faceta lúdica; cursos monográficos de cultura clásica y cursos de verano de la UPV; y viajes y escapadas con Oiasso, un programa que ofrece tanto viajes de larga distancia e internacionales y excursiones tanto de día como de fin de semana a entornos más cercanos.
El Museo Romano Oiasso está implicado además en incorporar nuevas perspectivas e intervenciones que permiten que el espacio museístico sea un lugar cercano y participativo, sensible a la realidad individual y particular de la ciudadanía. Oiasso cumple con los principios deontológicos de un museo en su apartado más social y en 2018 reforzó esta vertiente con nuevas formas innovadoras que han favorecido la inclusión social, la educación y la colaboración entre museo, entidades y asociaciones. Desde 2006 se han llevado a cabo anualmente acciones que han permitido que el espacio museístico sea un lugar más cercano a todos. Se han eliminado por ejemplo las barreras físicas, siendo el museo accesible en silla de ruedas en la totalidad de los espacios. Además, Oiasso desarrolla “Oiasso, un museo más social”, un programa dirigido a personas con diversidad funcional visual en el que diferentes “estaciones táctiles” permiten acceder a las colecciones mediante el tacto. Además se han cuidado aspectos como el guiado discal, las audiodescripciones, dinámicas olfativas, textos en braille, etc. Por su parte, el programa “Historias compartidas” es un ejercicio para compartir historias que nos acercan al mundo de la diversidad funcional y la discapacidad desde el punto de vista del arte, utilizando la creación plástica como una experiencia de aprendizaje colectivo.
En 2018, de la mano de la asociación Elkartu (Federación Coordinadora de Personas con Discapacidad Física de Gipuzkoa/Gipuzkoako Gutxitasun Fisikoa duten Pertsonen Federazio Koordinatzailea) cuya labor está dirigida a lograr la plena participación e integración del colectivo de personas con discapacidad en una sociedad que progresivamente más inclusiva, se ha redactado un Plan de accesibilidad que va a permitir incorporar medidas para favorecer la existencia de un museo pensado para todos y todas. Al mismo tiempo y en colaboración con la ONCE, se ha iniciado un proyecto de visitas adaptadas para personas con discapacidad visual y, por este motivo el museo fue nominado al Premio Cascabel de Oro que reconoce a las organizaciones que integran en su actividad la inclusión de todos los colectivos.
De cara al futuro, el área de Cultura y el Museo Romano Oiasso tienen en cartera seguir esta línea de colaboración con otras entidades culturales de primer orden que permita mantener esta intensa programación cultural, bien con exposiciones temporales o propuestas puntuales como hasta ahora. En cuanto a proyectos más singulares, desde el Museo apuntaban como novedades el programa de residencias de artistas “Arkeo&Art”, o la continuación de “Museomix”, un evento internacional en el que este equipamiento irunés es pionero en España.