La comarca del Bidasoa no registra casos de coronavirus pero padece sus consecuencias
Gipuzkoa es el territorio vasco que mejor resiste la epidemia con menos enfermos detectados
Irun y Hondarribia son (de momento) un oasis en esta crisis del coronavirus que cada vez deja más personas enfermas en todo el país. A pesar de tener constancia de cuarentenas que algunos vecinos de la comarca han realizado de forma voluntaria, de momento no se han confirmado casos positivos por el Covid-19.
A medida que se agudiza la curva de contagios en focos como Madrid, Vitoria o La Rioja los gobiernos regionales han adoptado medidas que mantienen en buena parte paralizadas estas comunidades. En otros territorios como el nuestro, a pesar de no haber tomado medidas tan restrictivas, las instituciones han limitado algunos accesos en tiempo y forma que debemos tener en cuenta:
En algunas residencias de mayores de la comarca como Caser o la residencias Inmaculada ya se ha tomado la decisión de prohibir las visitas de los familiares. La medida más estricta con la que pretenden evitar contagios en estos centros donde encontramos la población más vulnerable al virus.
También se ha decretado el cierre de los centros sociales de Irun y se suspenden todas las actividades que realiza este colectivo en locales de titularidad pública. Este mediodía se ha convocado a la Junta de portavoces en el consistorio irunes donde se ha dado cuenta de estas medidas.
El Movimiento de pensionistas de Txingudi por su parte tampoco podrá realizar sus reuniones en recintos cerrados y el próximo lunes, antes de la concentración habitual frente al Ayuntamiento, van a determinar si mantienen o suspenden esta dinámica.
En los centros educativos de momento se opera con normalidad, aunque en algunos como en Irungo La Salle su director, Xabier Cendoya, reconoce que han extremado las precauciones en cuestiones como la limpieza y la higiene personal. El responsable del centro reconoce además a la Cadena SER que “notan cierta sensibilidad” al constatar que algunos alumnos que tienen leves síntomas, aunque no sea por coronavirus, están optando por quedarse en casa.
El Real Unión y el Bidasoa Irun no jugaran los próximos encuentros
La crisis del Covid-19 también afecta al deporte en la comarca. La Federación Española de Fútbol decidió en un primer momento que todos los partidos de competiciones de fútbol y fútbol sala de ámbito estatal en categoría absoluta y juvenil se disputarán a puerta cerrada y finalmente se ha optado por la suspensión. También la restricción llega para el Bidasoa Irun tras la decisión de la Liga Asobal que ha anunciado que tampoco se disputarán los partidos que había programados.
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