La esperanza de las rebajas
El comercio de Irun confía en que las rebajas de verano dinamicen el consumo. El pasado 1 de julio comenzó oficialmente el período de rebajas de verano, que se extenderá hasta el 31 de agosto
- IÑIGO VILLAMÍA | IRUN
Las rebajas ya están aquí. El lunes, 1 de julio, los descuentos comenzaron a ocupar los escaparates del comercio irunés. Un período muy esperado tanto por los consumidores como por los comerciantes.
Entre estos últimos, no obstante, las valoraciones son contradictorias. Mientras que las grandes cadenas como Inditex (Zara, Massimo Dutti, Pull & Bear o Bershka) confían en una buena temporada de ventas, los comercios tradicionales, son más críticos y se quejan de la competencia de estas grandes empresas. Aluden a «la necesidad de mejoras urbanas, tales como el tráfico y el aparcamiento, para conseguir así atraer a un mayor número de clientes», según argumenta la propietaria de la tienda Mary Rosa.
Otro aspecto a tener en cuenta es el factor meteorológico. Tal y como comenta la encargada de Loreak Mendian, Maria Eugenia Ubani, «un verano lluvioso retrae a la gente con sus compras y hace que se tire del fondo de armario y no se adquieran nuevas prendas».
Desde la Oficina Municipal de Información al Consumidor (OMIC) y la Asociación de Consumidores y Usuarios del Bidasoa (ACUBI), siguen recordando que en las rebajas siempre es aconsejable hacer una reflexión antes de adquirir cualquier artículo. Es necesario diferenciar los productos que están rebajados de los que no lo están, así como etiquetar todas y cada una de las prendas con sus respectivos precios, ya sean del interior del comercio o expuestas en escaparates. Asímismo, los artículos que están en promoción han debido de ser comercializados anteriormente, mostrando tanto el precio previo como el actual. Se insiste en que el pago con tarjeta debe aceptarse salvo que las tiendas anuncien claramente lo contrario y que se exigirá siempre la factura de compra ante posibles reclamaciones. La previsión de gastos en el País Vasco, acudiendo a datos de la Federación de Usuarios-Consumidores Independientes (FUCI), será de unos 85 euros por persona aproximadamente, aunque la cuantía varía en función del tipo de negocio.
Se trata de una cantidad que puede servir de ayuda en un momento difícil del comercio y así dinamizar el consumo privado, clave para remontar la crisis económica. Las rebajas se convierten, pues, en una gran oportunidad para que esta situación dé la vuelta y el consumo se reanime.
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