El Gobierno Vasco pide «cumplirlos plazos» para que llegue el TAV
Irun fue testigo del primer encuentro cara a cara entre los responsables del Gobierno Vasco y del central
Era el primer encuentro cara a cara entre los responsables del Gobierno Vasco y del central, tras el anuncio del recorte en un 22,5% del Presupuesto previsto para 2019 para la Y vasca, y la confirmación de que el plazo de 2023 se dilata. Pero ni Arantxa Tapia ni José Luis Ábalos quisieron hablar expresamente de ello. Ni en público ni en privado. «No hemos tratado ese tema», aseguró la consejera de Infraestructuras a los periodistas, a los que explicó que sí comentaron el retraso en la reanudación de las obras del tercer hilo, paradas en Gaintxurizketa desde hace casi un año. «Han mostrado voluntad de acelerar» el proceso para redefinir el proyecto de la obra que queda y adjudicarla de nuevo.
El ministro tampoco quiso dar ninguna explicación extra sobre ese recorte, aunque se prevé que lo haga hoy en la presentación del proyecto de entrada de la Y vasca a Vitoria y de la futura estación.
Ni uno ni otro quisieron polemizar sobre una cuestión en la que Euskadi depende, en gran medida de Fomento y Adif, y donde las urgencias de unos no son tales para los otros. La dilación en los plazos anunciados y los reales son, en ocasiones, cuestión de celeridad a la hora de redactar los proyectos, como el de la estación de Donostia que según el plan inicial debería estar concluido pero lo hará antes de verano, o los del nudo de Bergara, donde hay solo un tramo en marcha.
Tapia, aún y todo, aprovechó para reclamar al ministro y a la responsable de Adif que «cumplan los plazos» comprometidos y extendió al Gobierno francés la petición para que preserven el eje ferroviario atlántico como «prioritario», en línea a lo defendido por la comisaria europea, para que el TAV atraviese Euskadi lo antes posible. Aunque aún no se haya establecido oficialmente otra fecha, 2023 parece ya inalcanzable.
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