domingo, 24 de noviembre de 2019

Por Iñigo Muguruza, «nuestro compañero»

Noticia publicada en Diario Vasco,el domingo día 24 de Noviembre de 2019.

Por Iñigo Muguruza, «nuestro compañero»

La orquesta del Conservatorio, amigos de Iñigo Muguruza, un coro de voces blancas y Ane García interpretan 'Little wing'. / F. DE LA HERA
La orquesta del Conservatorio, amigos de Iñigo Muguruza, un coro de voces blancas y Ane García interpretan 'Little wing'. / F. DE LA HERA

El Conservatorio de Irun rindió un «humilde pero muy sentido» homenaje al músico irundarra, quien fuera el primer profesor de guitarra eléctrica del centro

JOANA OCHOTECOIRUN.
La canción preferida de Iñigo Muguruza era 'Little wing' de Jimi Hendrix. «La lata que nos daba con ella... Qué mejor manera de rendirle nuestro pequeño y particular tributo interpretando una adaptación» de ese tema.
Así, con la orquesta del Conservatorio y amigos de Iñigo Muguruza a los instrumentos, un coro de voces blancas y Ane García, primero alumna y después colaboradora del músico irundarra, cantando esa letra que dice que «cuando estoy triste ella viene a mi, con mil sonrisas que me regala...». Dirigidos todos ellos por Julio Bravo, con una proyección de fotografías y vídeos de Iñigo Muguruza como fondo, y un auditorio lleno y conmovido que, al finalizar la canción, prorrumpió en un aplauso largo, sincero y cálido. Así recordó y rindió homenaje el Conservatorio de Irun a Iñigo Muguruza, el pasado jueves, en la víspera de Santa Cecilia.
La celebración de la patrona de los músicos fue, de este modo, «aún más especial», señaló el director del centro, Pedro Martínez. «Queremos recordar y poner en valor la figura de nuestro desaparecido compañero Iñigo Muguruza. Entendemos que la mejor manera de hacerlo es con la que era su pasión, la música», dijo Pedro Martínez al inicio del acto, mientras los componentes de la orquesta del Conservatorio tomaban asiento. El ligero trasiego mientras recolocaban sillas y atriles interrumpió las palabras del director, que no tardó en añadir que «esto le encantaría a Iñigo, porque es bastante improvisado».
El que celebró el Conservatorio de Irun fue «un humilde, pero muy sentido y muy merecido homenaje con el que queremos decir, sobre todo a su familia y sus amigos, que Iñigo ha dejado una profunda huella en este centro». Continuó Pedro Martínez señalando que «no vamos a descubrir ni a loar su conocida faceta de gran intérprete; para eso están los libros de historia, donde Iñigo ocupa ya un lugar destacado». Muguruza fue, recordó el director, «el primer profesor de guitarra eléctrica de este centro». Desde 1994, transmitió a su alumnado «todos sus conocimientos y su pasión por la música». Pero, además, «queremos destacar que era un excelente compañero, comprometido con el centro y siempre dispuesto a colaborar en todo lo que fuera necesario». Los profesores del Conservatorio no olvidarán «la de veces que con sus intervenciones en el claustro lograba desatascar sesudas e interminables discusiones, gracias a su fina ironía y su humor inteligente». La noticia de su enfermedad «y mucho más aún la de su temprana marcha», el pasado 5 de septiembre, fueron «muy duras» para los profesores del Conservatorio. «Pero en este centro siempre lo recordaremos con alegría, y muy orgullosos de haber tenido la suerte de haber compartido con él docencia», concluyó el director.

Diplomas para el alumnado

En el acto del jueves, además de ese homenaje a Iñigo Muguruza, se entregaron los diplomas a los estudiantes que finalizaron sus estudios profesionales en el Conservatorio de Irun el curso pasado. La orquesta interpretó otras dos obras, dirigidas por Ana Caballero. En una de ellas, el 'Concierto para violín y oboe' de Bach, participaron como solistas las jóvenes Uxue Villoria y Maite Mancisidor.

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