Santano y Laborda, escuchando las explicaciones técnicas. / Ayuntamiento de Irun
El alcalde de Irun, José Antonio Santano y la delegada de Obras, Cristina Laborda, se han acercado esta mañana al puente Avenida, que está en su fase final de obras para rehabilitar toda su estructura.
Este paso fronterizo (112 metros de longitud, formado por 5 vanos) permanece cerrado al público desde el pasado mes de abril del 2017 cuando, a la vista de un informe sobre su estructura, se determinó por seguridad prohibir el acceso y encargar un proyecto de rehabilitación. Esos trabajos empezaron en febrero de 2019 y se prevé que, tras culminar los últimos detalles, estos días, el puente se vuelva a abrir a peatones y ciclistas a finales de la semana que viene.
En palabras del alcalde, José Antonio Santano, «para el Ayuntamiento de Irun es muy importante la conservación, con más dedicación si cabe, de espacios que han sido y son historia de la ciudad como este puente Avenida. Habíamos detectado que era urgente y necesaria una actuación integral para restaurarlo y por eso encargamos este proyecto de rehabilitación que nos va a permitir mantener en buenas condiciones el puente y volver a abrirlo al paso una vez finalicen los trabajos».
Los trabajos ejecutados han consistido básicamente en restaurar los elementos de la estructura metálica del puente, y sustituir aquellas piezas que se podían encontrar más deterioradas. También se ha actuado en el cimiento de las pilas y estribos, y el tablero, así como en la barandilla y la urbanización superficial que es objeto estos días de las últimas tareas.
Una de las fases fundamentales, y que además fue visible muchos meses desde los alrededores, fue la creación de una estructura auxiliar compuesta por una viga metálica situada por encima del tablero del puente, que se apoyó en el estribo y la pila y del que queda colgado el puente, de forma provisional. Esta estructura tenía como objetivo soportar el puente mientras se trabajaba en su rehabilitación vano a vano. En detalle, se han sustituido o reforzado aquellas piezas en las que se hayan medido pérdidas de espesor locales o generales de más de un 20% del espesor original o donde la corrosión fuera importante. Para corregir las corrosiones detectadas en los perfiles y nudos de la estructura, cuando la pérdida de sección sea pequeña y no sea necesario un refuerzo, ha sido preciso realizar un saneado de las zonas afectadas.
Posteriormente se han realizado las actuaciones en la cimentación de pilas, así como la restauración e impermeabilización del tablero de hormigón. En su fase final se ha entrado a pavimentar la superficie y en colocar la barandilla, que es una réplica de la original. El presupuesto destinado a esta actuación ha sido de 2.053.015,85 euros millones de euros, y la empresa adjudicataria, ACCIONA CONSTRUCCIÓN S.A.
Un puente irunés con historia
Puente Avenida. / Ayuntamiento de Irun
El puente Avenida (así llamado porque era el final de la avenida de Francia), fue construido hace más de un siglo por el Ayuntamiento de Irun, con su exclusiva financiación, siendo alcalde de Irun, León Iruretagoyena. En 1902, siendo alcalde Cipriano Larrañaga, el Ayuntamiento notificó a la Diputación Foral de Gipuzkoa su proyecto de construir un puente para facilitar el paso a Hendaya, lo más cerca posible de la estación del Midi, pues en aquel sector sólo existía el servicio de barcas en la punta de Santiago, donde había un embarcadero y un pequeño pabellón de Aduana.
Aunque terminado en 1915 fue a lo largo de 1916 cuando se popularizó su uso, aunque solo entre peatones hasta que se efectuaron las pruebas de resistencia. Era un cómodo acceso que seguía utilizándose poco porque el paso a Francia estaba limitado a consecuencia de la I Guerra Mundial (1914-1918). En su primer año en activo más de 187.00 viandantes lo cruzaron previo abono de 5 céntimos de peaje.
Desde entonces, el puente Avenida ha sido escenario de algunos de los episodios históricos más importantes vividos a ambos lados de la frontera, con la Guerra Civil española y la II Guerra Mundial como principales hitos. El puente, construido para unir, fue sin embargo escenario de separación con el cierre de fronteras que, primero con la guerra española y luego con la segunda mundial, mantuvieron aislados a los ciudadanos de ambos países.
Por él han discurrido personajes importantes como Mata Hari o estrellas internacionales como Luis Mariano pero, sobre todo, ha sido para Irun un puente de conexión e intercambio, de salida hacia Europa y de entrada de las nuevas ideas, aspectos que han ido perfilando la idiosincrasia de los iruneses.
Algunos hechos relevantes en la historia
Barandilla restaurada y colocada de nuevo. / Ayuntamiento de Irun
1936, septiembre. Miles de iruneses escapan a Hendaya atravesando el puente para huir de la guerra y de la quema de la ciudad.
1939, septiembre. Comienza la II Guerra Mundial. La frontera se cierra en ambos lados.
1940, el que fuera presidente de la Generalitat en tiempos de la República, Lluís Companys, es entregado en el puente a la policía española tras ser capturado por la Gestapo. También ese año, un nutrido grupo de judíos logra atravesar el puente y ponerse a salvo huyendo del III Reich.
1955, fin del boicot internacional a España. Se le admite en la ONU y termina el bloqueo exterior. El puente Avenida se abre al tránsito cada vez mayor de camiones de mercancías y turistas.