CONSEJO VASCO DE FINANZAS
Las instituciones vascas asumen hoy que su previsión de ingresos para 2012 ha prescrito
La recesión hará casi inviable que Euskadi recaude 636 millones más que en 2011
14.02.12 - 02:59 -
El consejero Carlos Aguirre, con Javier de Andrés (Álava), José Luis Bilbao (Bizkaia) y Martin Garitano (Gipuzkoa). ::RAFA GUTIÉRREZ
¿Euskadi va a poder recaudar 600 millones de euros más que el año pasado, en medio de una dura recesión? Ésa es la pregunta que, aunque no venga en el orden del día, se harán hoy el Gobierno Vasco y las diputaciones en la reunión que mantendrán en el seno del Consejo Vasco de Finanzas para cerrar la liquidación de un más que decepcionante 2011. La respuesta no tiene mucho misterio: nadie confía en ello. Y nadie lo hace porque solo el año pasado el desfase entre la recaudación prevista y la finalmente ingresada fue de 1.020 millones, un agujero de proporciones mayúsculas que obligó a las administraciones vascas -fundamentalmente al Ejecutivo vasco, que recibe el 70% de lo que recaudan las diputaciones-, a hacer no pocos ajustes al ver que las previsiones no se iban cumpliendo.
Hasta ahí, más allá del drama de los ingresos, nada extraño. La habitual reunión del Consejo Vasco de Finanzas de febrero. Sin embargo, el cruce de reproches e insultos que en las últimas semanas han protagonizado PNV y PSE a cuenta del estado de salud de las finanzas vascas ha calentado las horas previas de un cónclave que el Ejecutivo vasco espera, pese a todo, que sea de guante blanco y en un clima de normalidad. Nada invita a pensar en palabras y posturas inocentes. Para empezar, la Diputación de Bizkaia hizo balance ayer de su lucha contra el fraude fiscal en un claro intento de defenderse ante el Gobierno Vasco, que le acusa de negarse a coordinar sus planes de inspección con el resto de diputaciones y el Ejecutivo autónomo.
Así, la Hacienda foral vizcaína aseguró haber detectado 560 millones de fraude fiscal en 2011, lo que supone llegar a duplicar los 281 aflorados en 2010 y dejar aún más lejos los 208 de 2009. Sólo por hacer una comparativa, la Hacienda guipuzcoana afloró en 2009 un total de 294 millones, que se elevaron a 317 en 2010. Los datos, sin embargo, no están exentos de interrogantes ya que las propias diputaciones han puesto en cuestión sus cifras de fraude aflorado, llegándose a acusar de inflarlas.
Dudas sobre el fraude
Para redondear la incertidumbre, el balance integrado de la hacienda vasca de 2009 que elabora el Órgano de Coordinación Tributaria, y que compara las cifras de las diputaciones, reduce ostensiblemente las cifras detectadas. Así, en 2009 Álava afloró 55 millones, Bizkaia apenas 36 y Gipuzkoa 84, según recuerdan fuentes del Gobierno Vasco, que añaden que el balance de deuda tributaria de actas formalizadas que recoge ese informe es el que realmente indica el fraude fiscal aflorado.
Lo cierto es que el diputado vizcaíno de Hacienda, José María Iruarrizaga, reiteró ayer su negativa a la conexión on line entre las administraciones tributarias que reclama el Gobierno Vasco, porque, a su juicio, «no es tan importante». Precisamente, el pasado viernes, el lehendakari, Patxi López, anunció que los servicios jurídicos del Gobierno Vasco están elaborando un informe para determinar si esa postura puede «incumplir» la ley de Armonización.
Ante esta solicitud, el responsable del fisco vizcaíno dijo que «él sabrá lo que tienen qué hacer» los servicios jurídicos del Gobierno Vasco. Tras indicar que está «muy tranquilo», Iruarrizaga aseguró que no se les puede «forzar en absoluto», porque, además, precisó que el artículo 13 de la Ley de Armonización sobre 'Planes Conjuntos de Inspección» al que se agarra el Gobierno Vasco está «vacío de contenido».
A expensas de si Gobierno Vasco y Bizkaia entierran, al menos hoy, el hacha de guerra, las instituciones vascas liquidarán una recaudación de 2011 para olvidar. Si la previsión de ingresos acordada en octubre de 2010 para 2011 fue de 12.500 millones, finalmente Euskadi ha recaudado 11.480 millones, 1.020 menos.
En Gipuzkoa, la recaudación bajó en 2011 un 2,3% con respecto al ejercicio anterior, situándose en 3.596,7 millones de euros, 84,5 millones por debajo de 2010, y 343,3 millones menos que la recaudación prevista en los presupuestos forales de 2011, que ascendía a 3.940 millones.
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