Noticia publicada en Diario Vasco,el viernes día 12 de Agosto de 2022
«La Feria de Coleccionismo vuelve a estar al completo»
Dejando atrás
las restricciones, el evento vuelve mañana a la plaza del Ensanche con
doce expositores y una gran variedad de artículos
La Feria del Coleccionismo lleva quince ediciones celebrandose en Irun y mañana sábado vuelve a asentarse en la plaza del Ensanche de 10.00 a 21.00 horas. Lo hará, como de costumbre, de la mano de Josema Martinez, un apasionado del coleccionismo que cada año se encarga de sacar adelante este evento.
Martinez es uno de los doce expositores que participarán en la feria, en la que «va a haber discos de vinilo y CDs, cosas de cine, carteles, postales, juguetes de colección, libros, un stand de objetos militares, otro de cosas relacionadas con Coca-Cola...» Es decir, habrá «todo tipo de cosas» del ámbito del coleccionismo. Además, como novedad de este año se podrán ver «un stand de bicicletas muy curiosas de colección» junto a otro de los puestos que «va a traer cochecitos en miniatura. Además los que vamos habitualmente estamos constantemente cambiando el género y llevando novedades».
Esta edición incluirá novedades, tanto con nuevos participantes como en el género de los expositores habituales
Martínez tuvo la idea de celebrar en Irun una feria de coleccionismo y desde entonces ha organizado ya quince ediciones. «Yo vengo del mundo del coleccionismo desde hace muchísimos años y he acudido a ferias en París, Barcelona, Valencia, A coruña...» afirma, y es que después de haber estado en tantas, «pensé, 'y por qué en Irun no?'», y fue entonces cuando hizo la propuesta. Desde entonces se ha celebrado anualmente «y ha sido un éxito. Todos los años ha ido muy bien, la gente está muy contenta». Cada año, reciben más público, que «viene desde Bilbao, Pamplona, Ordizia, Francia...» a ver las colecciones. Además, en los propios puestos también «hay gente de fuera: de Donostia vienen 3 ó 4, de aquí somos 4 ó 5, de Francia viene alguno...» y aunque la mayoría de los expositores sea relativamente locales, el alcance de la feria respecto al público es considerable. Martinez también añade que «los que vienen a vender ya llevan muchos años en esto y no se improvisa nada», es decir, es cada vez más profesional.
De vuelta a la normalidad
Este año, además, al dejar atrás las restricciones que trajo la pandemia, «tenemos más permisividad». El año pasado exigían unas entradas y salidas a cada stand, «estaba todo muy vigilado y nos habían limitado el espacio», que esta edición se amplía para recobrar las dimensiones de la feria de otros años. También vuelve a la normalidad en cuanto a asistentes, expositores y stands, por lo que «volvemos a estar al completo en esta ocasión». Sin embargo, esos dos años no han hecho que la acogida de la gente disminuya, sino que ha sido «al revés» y, en opinión de Martinez, «la gente está con ganas de acudir a este tipo de cosas y se lo toma con ganas».
Para esta XV edición no están previstas precipitaciones, y comenta que «ojalá esté garantizado el buen tiempo» porque hace unas siete u ocho ediciones la lluvia les jugó una mala pasada. «Fue horrible», asegura; tuvieron que suspender la feria por culpa de una tormenta y recuerda que «tuvimos que desmontarlo todo y salir corriendo. No quiero pensar en que vaya a ocurrir algo así».
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