Después de que el pasado mes de octubre se alcanzara un acuerdo para la construcción de un tercer ambulatorio en Oñaurre, la alcaldesa de IrunCristina Laborda, anunció ayer que, para dar respuesta a las necesidades sanitarias de la ciudad hasta que dicho proyecto sea una realidad, el Consistorio ha ofrecido a la Consejería de Salud un espacio ubicado en la esquina de la calle Alarde con la avenida Euskal Herria.

Se trata de una medida que busca dar respuesta a las peticiones tanto del personal del ambulatorio Irun Centro, que actualmente se ve obligado a ofrecer parte de sus servicios en los barracones prefabricados que se han instalado en la parte exterior del edificio, como a las de los propios usuarios y usuarias de este centro de salud. “En los presupuestos del Gobierno Vasco ya se ha habilitado el crédito para encargar el proyecto de la construcción del tercer ambulatorio en Oñaurre, pero hasta entonces hay que dar una solución, porque la ciudadanía irundarra no recibe una correcta prestación”, dijo Laborda

"Deterioro en el servicio"

En este sentido, la alcaldesa reconoció que el parón que se ha producido en torno a la construcción del tercer ambulatorio en Oñaurre, previsto desde hace una década, ha supuesto “un deterioro en el servicio que se presta en la ciudad”, que requiere ofrecer soluciones hasta que se ponga en marcha la nueva infraestructura sanitaria.

El local cedido por el Ayuntamiento es un bajo que cuenta con 588 metros cuadrados y que se ubica muy cerca del ambulatorio Irun Centro, pero que se encuentra todavía sin habilitar, una tarea de la que deberá encargarse la Consejería de Salud. “Les hemos ofrecido este espacio, y entendemos y esperamos que den una respuesta positiva”, añadió la primera edil.

Por su parte, EAJ-PNV ha recordado que el grupo municipal ya llevó al pleno municipal del 21 de marzo del pasado año una moción para habilitar locales municipales a los que trasladar varios servicios del ambulatorio Centro, una propuesta que fue llevada a votación y rechazada por todos los grupos políticos del Ayuntamiento de Irun. Los jeltzales han valorado positivamente la noticia de la cesión de este espacio, pero han lamentado que la respuesta a las actuales necesidades sanitarias de la ciudad llegue “siete meses tarde”.